Hace dos meses, se viene desarrollando una fuerte lucha de trabajadores precarizados por el pase a planta permanente en la provincia de Chaco. Los trabajadores de la Secretaría de Cultura se pusieron de pie protagonizando un paro y acampe. Varios precarizados de Educación -porteros de escuela y personal de maestranza- se encuentran dando una pelea por el pase a planta bajo convenio. En este marco, tomó forma el Frente de Trabajadores Precarizados en Lucha, impulsado por la Corriente Clasista Goyo Flores de Razón y Revolución.
La situación de los compañeros es crítica. El deterioro salarial y de las condiciones de vida se agrava en los últimos meses, profundizando un ataque burgués que lleva décadas. Así, a nadie escapa que la mitad de los chaqueños se encuentran bajo la línea de pobreza. Los montos de las Becas que perciben los trabajadores precarizados se ubican entre los $1000 y $5000, es decir, un sueldo por debajo incluso del nivel de indigencia. Los patrones de este país consideran que buena parte de los obreros de Chaco “sobran” para producir riquezas. Así, el Estado suele ser el contenedor de todo ese sector de la clase obrera, sobre todo, en las provincias. Y lo hace con sueldos y condiciones de miseria y precariedad.
El principal responsable es el actual gobernador Oscar Domingo Peppo, pero también Jorge Milton Capitanich. La situación de los compañeros tiene por lo menos, quince años. Claro que existe complicidad de la burocracia sindical de U.P.C.P., dirigida por José Niz, quien no movió un dedo por los trabajadores precarizados.
Así, ante el feroz ajuste de Macri y Fernández, los compañeros respondieron con movilización y un plan de lucha progresivo. En sesenta días, se movilizaron numerosas veces al Ministerio de Educación, protagonizado permanencias y acampes, y participaron participado de varias marchas en la capital (como la de ATE el 10/9 o la Jornada de Lucha del Plenario de Trabajadores Ocupados y Desocupados del 24/9). En el marco de este plan de lucha, fueron construyendo la unidad de los estatales. Mientras la burocracia fragmenta, los trabajadores precarizados de nuestro frente estrecharon sus manos con los precarizados de Cultura y otros sectores.
El reclamo por el pase a planta fue tomando fuerza. Recientemente, el Ministerio de Educación tuvo que salir a dar respuestas confeccionando un listado de ingresos a planta. Sin embargo, esto fue absolutamente irregular. Hubo favoritismos y acomodos por parte de funcionarios y punteros de turno, mientras varios compañeros que tenían alrededor (y más) de 10 años de antigüedad, quedaron fuera. En la última semana, el escenario se agravó por una cautelar del Frente de Todos que suspendió los decretos de pase a planta hasta que asumiera Capitanich. Peppo y Coqui se están peleando para ver quién mete más gente de su aparato. En cambio, los precarizados tomaron el toro por las astas e impulsaron acciones propias: movilizaciones, piquetes y asambleas. La lucha es clara. Queremos el pase a planta, en blanco y bajo Convenio Colectivo de Trabajo, el aumento de los montos de las Becas 311 y 317 igual al costo de Dos Canastas Básicas Totales, el cumplimiento de la Ley N° 6.665 de pase a planta, el fin de la persecución sindical a los compañeros precarizados por parte de los directivos de escuelas primarias y secundarias, la libertad sindical para elegir delegados, realizar asambleas en lugares de trabajo y participar de movilizaciones por reivindicaciones del sector, la protección sindical de los gremios (UPCP, ATE), la provisión de los elementos de higiene y de limpieza. Contra los planes de los gobiernos patronales, vamos a imponer con nuestra propia fuerza estas reivindicaciones.