Repasemos los hechos. El martes por la noche, Áñez se autoproclamó presidenta de Bolivia aduciendo que se había generado un vacío de poder. Tras la renuncia de Evo, Linera, la presidenta del Senado, Adriana Salvatierra, y de Víctor Borda, presidente de la Cámara de Diputados, Jeanine Áñez (Unión Demócrata), segunda vicepresidenta del Senado, asumió el mando. A su asunción, asistió también el fascista Camacho, quien incluso se asomó al balcón junto con la nueva mandataria.
La primera sesión legislativa se desarrolló sin quórum, ya que las 2/3 partes que posee el MAS no asistieron, aduciendo cuestiones de seguridad. Desde su asunción, Áñez ha nombrado un gabinete conformado por once miembros, ocho de ellos de la región llamada Media Luna, de donde proviene también Áñez, y seis del partido Unión Demócrata. También, renovó el mando militar, desplazando a Kaliman, y colocando a Sergio Carlos Orellana Centellas, como nuevo Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas (FFAA), Pablo Guerra (Jefe del Estado Mayor), Iván Inchauste (comandante del Ejército), Ciro Álvarez (Fuerza Aérea Boliviana) y Moisés Heredia (Armada Boliviana). Consciente de que su poder era ilegítimo, y que Camacho solo reúne adhesiones en Santa Cruz, removió rápidamente al masista Kalimán. Así, los camiones militares se pasean por La Paz, se busca censurar a los periodistas que muestran las movilizaciones amenazándolos de acusarlos de sedición, y el toque de queda está a la vuelta de la esquina. Es decir, este gobierno carece del apoyo mínimo de las masas.
Tres fuerzas y una perspectiva
Evo pidió la intervención de la ONU y la Unión Europea. Parece que esos órganos no son «imperialistas». Desde México, justificó su salida del país aduciendo cuestiones de seguridad personal y la intención de “evitar un derramamiento de sangre” que él había provocado antes y que quería seguir provocando hasta que se dio cuenta que ni con una masacre podía quedarse en el poder. Planteó estar dispuesto a volver del país “si el pueblo lo pide” y convocar a un diálogo nacional, incluyendo a “todos los sectores” (es decir, todos los partidos burgueses), que esté auspiciado por la Iglesia. ¿Qué pensarán los que se horrorizaron por la biblia en el Quemado?
Evo, lejos de apoyar un mayor desarrollo de la movilización, convocó a que se detengan las protestas en el sector de salud y educación:
“Ya no como presidente, sino en mi condición de ser humano, pido a los trabajadores de salud y educación volver a prestar servicios a la población, luego de tantos paros y huelgas. Por encima de posiciones políticas, tienen la misión de cuidar con calidez y solidaridad al pueblo”.i
Estos sectores (salud y educación) han sido los primeros en salir a protestar contra el gobierno de Evo Morales, ya que rechazaban las condiciones en que se aplicó el Sistema Universal de Salud Gratuita, que los médicos cuestionaron por degradar sus condiciones laborales, presupuestarias e higiénicas.ii A esta protesta se habían sumado también los docentes, que se manifestaron en apoyo con la lucha de sus compañeros. Sergio Choque, diputado del MAS, también planteó su oposición a las movilizaciones ya que “dentro de los radios urbanos también hay madres e hijos” que “iban a sufrir las consecuencias”.iii Clarito. Quieren acallar las protestas de los sectores que se estaban movilizando contra Evo antes, y continúan en las calles ahora contra el gobierno de Áñez.
El miércoles por la noche, el mismo Choque consiguió ingresar en la Asamblea y realizar una sesión en la cual fue elegido como presidente de la Cámara de Diputados, llamando literalmente a que la gente no esté en las calles: “A los sectores movilizados apaciguarnos […] ya no podemos seguir enfrentándonos”.iv Choque planteó también que se presentará un proyecto para el retiro de las fuerzas militares de la calle. Está claro que se está planteando una salida negociada, ya que Choque sostuvo “Hemos llegado a consensos en la bancada mayoritaria MAS-IPSP con la participación incluso de la Dip. Inés López de oposición (UN), logrado apoyo del pleno para que asuma por este periodo legislativo la presidencia de la Cámara de Diputados”.
Resulta curioso, unas horas antes, las fuerzas policiales habían impedido a la presidenta de la bancada del senado, Adriana Salvatierra (del MAS), ingresar al senado, desatando una represión sobre los manifestantes que se encontraban en Plaza Murillo. Horas más tarde, Choque, junto a otros 76 parlamentarios consiguió ingresar, sesionar, y llamar a la pacificación. Lo mismo hizo Omar Aguilar, senador del MAS, quien en una entrevista radial planteó que “Nuestro objetivo es pacificar el país, no es bloquear esta gestión de transición de Jeanine Áñez”. Llamó también a normalizar la situación, recuperar todo el trabajo legislativo, y reconoció reuniones con Arturo Murillo (ministro de gobierno) sin confrontación, porque se trata de un gobierno de transición porque a “Evo le quedaban unos meses”.v Es decir, con o sin Evo, una salida institucional está en marcha. Curiosos “golpe” en el cual golpistas y perseguidos se reparten los organismos del Estado y se la pasan negociando una salida.
Pacificar la calle parece ser la condición para llegar a un acuerdo. Sin embargo, esa tarea no es sencilla. Primero, porque Evo sí quiere sacar a toda movilización independiente, pero no va a sacar a su gente hasta no llegar a un trato favorable: elecciones donde él o un sucesor se pueda presentar y que el MAS tenga injerencia en el Tribunal Superior Electoral.
La carta se juega en la tercera fuerza: la movilización obrera independiente. Recordemos que la COB y el gremio de mineros, fundamental en Bolivia, le habían retirado su apoyo a Evo y solicitado que renuncie. Hoy se movilizan contra Áñez, y le han dado un plazo para que restablezca el orden constitucional, lo que no es sino entregar a la burguesía la resolución del conflicto. Sin embargo, el “retorno de Evo” no es el grito principal de las movilizaciones. El grueso tuvo “la defensa de la wiphala” (bandera indígena) como principal consigna, debido a la imágenes y videos de quemas de la bandera que llegaban desde Santa Cruz y la región de la Media Luna, o sea, no directamente eran movilizaciones pro Evo. El núcleo del apoyo a Evo Morales se concentra en Cochabamba, cuna del movimiento cocalero, donde el dirigente Andrónico Rodríguez, y sus seis federaciones que se han declarado en movilización permanente hasta el retorno de Evo.vi Situación similar, ha sucedido con la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia a la cual está afiliado el propio Evo. En La Paz, la situación aparece más dividida. Una parte de El Alto, se moviliza en contra de Áñez y a favor del retorno Evo Morales. Pero, hay otra que moviliza por la salida del gobierno de Áñez, por el cese de la represión, por la defensa de la wiphala, contra el racismo y la xenofobia expresada por Camacho, sin pronunciarse a favor del retorno de Evo Morales, como sucedió en uno de los cabildos abiertos de El Alto, donde se reclama la salida de Soledad Chapetón, alcaldesa opositora de El Alto, de Áñez, y el respeto a la wiphala. Allí también, se cuestionó a la burocracia masista por haberlos abandonado y traicionado. Resulta llamativo, la ausencia de pancartas y banderas del MAS en dichas movilizaciones.
En Potosí, la situación aparece más clara, si bien hubo un sector minero que se movilizó a favor de Evo Morales cuando este aún estaba en Bolivia, los de San Cristóbal, la mina más grande del país, exigían condiciones laborales y el pago dominical adeudado desde el año 2007 y entraron en paro el día 18 de agosto. A esta fuerza independiente se sumaron también mineros de Ocurí y Chollja. Incluso, algunos de estos sectores, impulsaron un “Encuentro obrero, campesino, estudiantil y popular” en La Paz y Cochabamba. Aunque minoritario, se expresa allí una incipiente independencia de clase, ya que entre sus resoluciones se encuentran “Impulsar la auto organización independiente de las organizaciones obreras, campesinas, indígenas, estudiantiles y populares, contra la derecha y contra las medidas antipopulares del MAS” y “Por la unidad de las y los explotados y oprimidos, frente a ambas facciones burguesas en contienda”.
El apoyo a Camacho y Áñez se concentra solamente en Santa Cruz. Es decir, por un lado tenemos un gobierno con un vínculo muy débil con las masas, que se dedica a reprimir a la clase obrera, pero no a los funcionarios del MAS. Por el otro, el masismo en crisis con sus propias bases, a las cuales ha tenido que agredir mediante punteros para disciplinarla, como se ha denunciado. Por el otro, una clase obrera que, aún confundida, se niega a dejar la calle a pesar del pedido y la represión de Evo, ayer, de Áñez, hoy.
El trotskismo argentino: con Evo, con Alberto y con la ONU…
En este contexto, la izquierda argentina sigue en manos de una de las fracciones burguesas. Ayer, 14 de noviembre, los partidos del FITU votaron con el Frente de Todos y legisladores del PRO, es decir, la burguesía en pleno. Y se enorgullecen de eso…
El PO oficial ha planteado que la OEA “no puede ocultar que el MAS sacó en la elección del 20 de octubre el 46-47% de los votos, a 9 o 10 puntos de distancia de Carlos Mesa, su inmediato opositor”. El pequeño detalle, es que esa diferencia lo hubiese puesto a Evo Morales frente a un ballotage al que hubiese enfrentado a una oposición unificada, donde otro hubiese sido el panorama. Por eso, la necesidad de manipular las elecciones. A continuación, sostienen que Evo capituló al igual que Perón en el ’55. En ambos casos, el “pueblo” quería enfrentar al golpe, pero ambos dejaron sin referencia política a esa lucha. Incluye, dentro de esta crítica, también a Alberto Fernández quien solo se limitó a “‘conseguir’ el exilio para Evo Morales. Fernández no llamó a resistir, sino que se dedicó a buscar protección para Evo y los dirigentes del MAS. A alejarlo de Bolivia y dejar descabezada la dirección del MAS”. Por último,
“Áñez promete convocar a elecciones democráticas, sin fraude, a la brevedad. Pero se intenta repetir los pasos ‘electorales’ que en Brasil llevaron al poder a Bolsonaro. Allí se anuló la candidatura de Lula y se lo envió a la cárcel en forma arbitraria. En Bolivia se pretende hacer lo mismo con Evo y hasta con el MAS, a pesar de ser el partido mayoritario. Habría elecciones ‘democráticas’ con esta proscripción, convocada por una presidenta que nadie eligió, designada por un Parlamento sin quórum custodiado por la policía y el Ejército”.
En realidad, hasta ahora, no hay proscripción al MAS, incluso este partido consiguió sesionar y elegir un presidente de la Cámara de Diputados, al día siguiente de la asunción de Áñez. Lo que muestra que hay una voluntad de darle una salida negociada a la crisis, algo que el PO parece empecinado en negar. Lo que sí se introdujo, fue una modificación en la Constitución que “corrige” la interpretación que la Justicia hizo para permitir a Evo volverse a presentar. Además de llamar a recuperar los sindicatos para la lucha antigolpe, el PO plantea que:
“La consigna es derrotar el golpe. Hay amplios sectores de las masas explotadas que levantan la consigna de “la vuelta de Evo”. Incluso sectores que venían rompiendo con el MAS, espantados por el fachaje Camacho-bolsonarista. Se impone un frente único para aplastar el golpe, liberar a los detenidos, destronar a la presidenta, retirar a las fuerzas represivas. Es necesario pasar a la organización de la lucha contra el golpe en Bolivia, al armamento defensivo de los barrios, los campesinos y las fábricas, al lanzamiento de la huelga general, al llamado a la confraternización con soldados y policías que no quieran reprimir al pueblo trabajador”.vii
Es decir, hay sobradas muestras de que la conciencia de la base masista está en crisis con esa dirección, sin embargo, el PO propone adaptarse a esa situación con dos consignas que lo ubican en el campo del MAS, en Bolivia, y en el campo del kirchnerismo, en Argentina.
La Tendencia del PO, también se ha expresado, aunque su balance ha sido aún más rastrero. Reconoce la existencia de un golpe, pero también de un desmoronamiento del MAS, por su claudicación:
“el golpe montado por Trump, Bolsonaro, el fascismo boliviano y los mandos de la policía y las fuerzas armadas, tuvo lugar en medio de un desplome del régimen bonapartista de Evo Morales, que en ningún momento preparó una resistencia popular, ni quiso hacerlo con posterioridad. Luego de la renuncia “sugerida” a Morales por el ejército, los parlamentarios del MAS formaron fila para presentar la de ellos mismo sin que nadie los ‘invitara’ a hacerlo. La crisis política en Bolivia es el fruto de dos procesos: un golpe imperialista, de un lado, y el desmoronamiento del bonapartismo indígena del otro. La reacción contra el golpe por parte de las masas de El Alto y de sindicatos y trabajadores en el Altiplano, se presenta en el escenario de la crisis como una iniciativa independiente, que incluye naturalmente a la militancia media del propio MAS”.viii
No se diferencia del PO oficial respecto de las críticas a la posición asumida por el kirchnerismo, e incluso las supera planteando que:
“La resolución votada en el Congreso es una farsa: simplemente no plantea la reposición de Evo Morales en el gobierno. El pronunciamiento nacional y popular es abstracto – en criollo, un verso. La diplomacia albertista no va a movilizarse por el restablecimiento del orden constitucional quebrado – hará lo que todo el mundo: pedir elecciones organizadas por un gobierno golpista fascistoide. Rascando un poco, se observa que ha tomado la tesis de la oposición macrista, que el gobierno de Morales perdió legitimidad por la aplicación del fraude”
La Tendencia, no solo llama a reponer a Evo Morales, sino que se vuelca contra el movimiento de masas que se movilizó contra Evo y lo rechazó en las urnas con anterioridad. Es decir, están a la derecha de las propias organizaciones obreras que salen a la lucha y están proponiendo, como Evo y como Choque, que se desmovilicen, por la razón o por la fuerza…
En la exposición de Bregman en el Congreso, en la sesión referida a la discusión del pronunciamiento frente a la situación de Bolivia, sostuvo que había que rechazar que el Congreso no hablase de golpe de Estado, que ya es el quinto en la región con EE.UU. detrás (Honduras, Paraguay, Venezuela, Brasil, y ahora Bolivia), y dijo también que entre Chile y Venezuela hay una diferencia fundamental, que tiene que ver con hacia dónde apuntan los fúsiles.ix Como si no alcanzase con defender a Evo, también defiende a Maduro. Un dirigente de cualquier partido de izquierda debería saber que el chavismo se ha caracterizado por reprimir a los trabajadores, principalmente los militantes revolucionarios, tal como hace Piñera, que permanecen aún en la cárcel mientras libera a dirigentes opositores. Lo peor, es que no dudamos de que Bregman lo sabe, sino que prefiere ocultarlo. De todas formas, el PTS al menos sí ve lo obvio: que el MAS busca negociar y utiliza la calle como carne de cañón para una mejor negociación de la transición.x Si bien llama a profundizar la autoorganización y coordinación de los focos de resistencia, no convoca a que las bases rompan definitivamente con el MAS, ni muestra qué orientación debe tener esa “autoorganización”. Otro dirigente del PTS, Del Corro, sostuvo en una entrevista que no estaría de acuerdo con que el MAS acepte una proscripción de Evo Morales, porque eso sería una profunda derrota frente al gobierno de Áñez. Otro que pide ficha de afiliación al MAS…
En su exposición en el Congreso, Mónica Schlotthauer de IS, quien votó a favor del proyecto, sostuvo que fue el propio Evo Morales quien se encargó de cavar su propia tumba por no combatir a las transnacionales, el latifundio, y negociar con la derecha santacruceña. Afirmó que solo podrá haber democracia si la COB convocase a una Asamblea Nacional de las organizaciones populares, que retome los reclamos de la Agenda de Octubre, y encabece un gobierno popular para luego convocar a elecciones.xi La pregunta: ¿por qué hay que esperar a la burocracia de la COB? ¿Por qué no pueden implementarlo ya mismo los organismos en lucha? ¿Y por qué hay que ajustarse a la Agenda de Octubre?¿Por qué no se puede plantear un programa abiertamente socialista?
Finalmente, el NMAS argentino ha planteado que Evo y Linera no habían cometido un fraude grosero, “aunque hayan metido un poco la mano en las urnas aquí o allá”, que es indiscutible que tenían una amplia diferencia a favor. En todo caso, Morales le erró en presentarse originalmente porque eso hizo que las masas giren a la derecha. Una falta de respeto del NMAS a todos nosotros: vale el fraude. Es decir, el “Santo Evo” tiene permitido todo, si la clase obrera se enoja, es porque se ha entregado a la reacción. Sí menciona que ambos traicionaron a las masas porque “eran ellos quienes estaban llamados a dirigir la resistencia”. Es decir, defiende la entrega completa de las masas al campo de la conciencia reformista. Si bien tiene un apartado entero dedicado al poder dual, nada dice respecto a cómo construirlo ni quiénes tienen que llevar adelante esa tarea. Si nos guiamos por sus argumentos anteriores, el masismo “honesto” sería el embrión de ese doble poder.
Como vemos, la oposición y el masismo buscan darle una salida institucional al asunto poniendo como presa de cambio a la clase obrera sobre la que se descarga la represión. Obviamente, esta clase también es la que pone los muertos y heridos. Para evitar el derramamiento de sangre, es imperioso que la clase obrera triunfe y evite que se instale una dictadura de transición contra el movimiento. Por eso no hay que dudar con los planteos y las consignas que tienen que impulsarse. No puede pedirse abiertamente el retorno de Evo Morales, como lo hizo el NMAS y la Tendencia, así como tampoco un pedido camuflado, como el PO y el PTS, o mantener la confianza en las burocracias como propone IS. Es fundamental impulsar asambleas por barrios, lugares de trabajo, fábricas, campos, etc., que levanten la consigna “Que se vayan todos”. Sin titubeos, creando nuevas organizaciones de base. Solo así puede conseguirse la independencia necesaria de la clase obrera para poder salir de la crisis y dejar de pagar con su sangre los acuerdos de la burguesía. Que se vayan todos y que no vuelva nadie.
Investigación y cárcel a los responsables de los todos los asesinatos de los obreros en lucha.
Por asambleas por barrio, fábrica, campo.
Ocupación de todos los edificios públicos.
Por una asamblea nacional de trabajadores de Bolivia.
Por un Congreso de la Izquierda Latinoamericana.
Notas
ihttps://twitter.com/evoespueblo/status/1193933058640093184
iihttps://mundo.sputniknews.com/america-latina/201911111089278022-evo-morales-pide-que-cesen-las-huelgas-de-la-salud-y-la-educacion-en-bolivia/
iiihttps://twitter.com/JosmiavenJose/status/1194619554032472064?fbclid=IwAR0CmSl8Sby4ac04qrmDCCvtHzYDIyEbwHvbMFlHEJzq4tbDojzobDdRCtU
ivhttps://www.telesurtv.net/news/bolivia-camara-diputados-presidente-sergio-choque-20191114-0008.html
vhttps://ar.radiocut.fm/audiocut/omar-aguilar-objetivo-es-pacificar-pais-no-bloquear-gestion-transicion-jeanine-anez/
vihttps://eju.tv/2019/11/cocaleros-se-declaran-en-movilizacion-hasta-que-evo-retorne-y-cumpla-su-mandato/
viihttps://prensaobrera.com/internacionales/66402-bolivia-abajo-el-golpe-y-su-presidenta-titere
viiihttps://www.facebook.com/jorge.altamira.ok/posts/1336842256496632?__tn__=K-R
ixhttps://www.laizquierdadiario.com/Aunque-a-los-amigos-de-Trump-no-les-guste-en-Bolivia-hay-un-golpe-de-Estado
xhttps://www.laizquierdadiario.com/Diputados-del-MAS-proponen-negociar-con-golpistas-agenda-electoral-y-traicionan-lucha-del-pueblo