Felfort –ubicada en Almagro- registra ya 33 casos de COVID entre sus trabajadores. No es un accidente. Se trata del resultado lógico de una política criminal amparada por el gobierno nacional. Como advertimos en otro comunicado, la supuesta cuarentena “estricta” esconde que para los capitalistas, el aislamiento obligatorio es de papel. Pero además, para llegar a este punto, ellos cuentan con la complicidad de la burocracia sindical, en este caso, de Daer y el STIA.
En primer lugar, Felfort produce chocolates y golosinas. Es decir, se trata de una producción no esencial en el marco de la cuarentena. Por eso, en marzo, su comisión interna –dirigida por la antiburocrática Lista Transparente- protagonizó una lucha en la fábrica para que los trabajadores entren en cuarentena. En el mismo sentido, tuvo lugar un paro en Pepsico Mar del Plata y algunos reclamos en Mondelez. En ninguno de los casos, el STIA apoyó a los trabajadores. Al contrario, el gremio se había sentado a garantizar la producción en un comité de crisis, previo al decreto de la cuarentena. Solo después, emitió una carta tibia para revisar estas situaciones, que no acompañó con ninguna medida. Como no podía ser de otro modo, quedó en la nada.
Felfort además escatimó en todos los gastos necesarios de seguridad e higiene. En algunos sectores, no aplicó el distanciamiento. A duras penas, después de varios reclamos, entregó mascarillas y dispuso de un solo aparato para controlar la temperatura. De este modo, hace unos días, se habían confirmado 5 contagios. Pero en tan solo diez días, ese número ascendió a 33. Felfort apenas paró el sector de producción durante tres jornadas para satinizar y luego retomó el funcionamiento. Para cubrir a los trabajadores aislados, tomó gente con contrato eventual. En eso consisten los “protocolos sanitarios” patronales. Hoy con 33 contagiados, Felfort sigue presionando a los trabajadores para dar continuidad a la producción, convocando incluso a personal asintomático que fuera contacto estrecho de casos confirmados. Daer y el STIA, bien gracias.
Exigimos el cese inmediato del funcionamiento de Felfort, con el pago íntegro del salario para todos sus trabajadores. Planteamos además que toda producción es verdaderamente esencial según las necesidades sociales, no según el criterio de la ganancia capitalista. Finalmente, exigimos la fiscalización obrera de los protocolos sanitarios con comisiones electas en asambleas, en Felfort y en todas las fábricas. Cuarentena YA para todos los trabajadores de Felfort.
Corriente Clasista Goyo Flores
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