Como advertimos en su momento, Techint se preparaba para más ajuste en sus plantas de Tenaris (Campana, Valentín Alsina, Villa Constitución y San Luis). Ya viene con un esquema de suspensiones previo. Incluso en Siderca, las suspensiones fueron actualizadas al 80% en el verano, luego del conflicto por despidos, en el que la empresa presionaba por renovar al el acta de suspensiones al 70%. Como también señalamos, la UOM Campana se limitó a “negociar” sin poner en pie una sola medida de lucha. Así, presentó el resultado como una negociación favorable por “cuidar el empleo”, a pesar de recortar el salario.
Como dijimos, esa política llevaba por mal camino, porque era solo cuestión de tiempo para que la empresa avanzara todavía más en un contexto de crisis –agravada por la pandemia- y baja de las ventas. Y los hechos lo confirman. En Siderca, avanzaron sobre personal tercerizado. Luego vendrían los black outs. Y ahora la empresa comenzó a anunciar un recorte del 50% del salario de los trabajadores de Techint. Incluso en el radio-pasillo, se habla de la posibilidad de ejecutar hasta 1000 despidos. La última novedad es que la UOM advierte que la empresa iría a un lock-out desde el 1/8.
En Siat, la empresa también pretende abonar al 50% del neto, según planteó la empresa, con sumas no remunerativas. Recordemos que en esta planta, además, hubo una quita de los premios a la productividad apenas iniciada la cuarentena. Allí, los trabajadores ya avisaron que se predisponen a luchar. La empresa lanzó advertencias para estos casos: de no llegar a acuerdos con las Comisiones Internas, el pago será equivalente “solo al salario básico para los licenciados, que representa una porción muy minoritaria del ingreso conformado habitual”.
Como se ve, Techint no piensa resignar sus ganancias en este contexto de crisis, pese a que Rocca y compañía se enriquecen todos los días a costa del esfuerzo de los trabajadores. Pero la solución no puede limitarse a lo legal ni a negociaciones administrativas en el Ministerio de Trabajo.
Está planteada la necesidad de unificar fuerzas entre las corrientes independientes, el activismo y todos los trabajadores que pretendan parar la mano de Paolo Rocca en Tenaris. Es momento de dar una respuesta de conjunto. La UOM –en particular, en Campana- parece prepararse para otra negociación derrotista sin medida de lucha alguna. Eso va a significar que buena parte del ajuste de Techint va a pasar indefectiblemente, como ya ocurrió en el verano en Siderca. La única alternativa es impulsar unitariamente un llamado a la acción y a la deliberación de la fábrica en asambleas.
El discurso desmoralizante del “cuidado del empleo” en estos “tiempos duros” solo sirven para justificar la pasividad de una dirección que va a dejar que pase el ajuste sin mover un dedo. Es el discurso de Caló a nivel nacional cuando solicita un bono no remunerativo como “reactivación” de la paritaria. Por eso, a la baja salarial y a la posibilidad de los despidos, hay que oponer una respuesta activa desde el primer momento en las plantas de Tenaris y en todo el gremio.
Corriente Clasista Goyo Flores – Corriente Sindical de Razón y Revolución
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