En el día de ayer los trabajadores de CONICET pararon y se movilizaron para exigir una recomposición salarial. El gobierno que asumió con la promesa de aumentar el salario del personal del organismo, los mantiene por debajo o apenas por encima de la línea de pobreza. A las miserables paritarias estatales firmadas por
ATE y UPCN, el gobierno sumó algunos aumentos ínfimos y diferenciales por categoría. ATE CONICET se mantuvo en la pasividad, al igual que ATE Nacional, frente a la degradación cada vez más acelerada del salario. El movimiento autoconvocado, que surgió entre los trabajadores del organismo a partir de una reunión convocada por Razón y Revolución Ciencia y Técnica, protagonizó durante 2020 la lucha salarial y consiguió un aumento por encima de la paritaria estatal, que resultó insuficiente para sacar a los salarios de la pobreza. Tan mísero es el nivel salarial que se está produciendo un verdadero éxodo de investigadores hacia el sector privado o el exterior. Incluso muchos son repatriados que tras volver se encuentran con una realidad laboral hostil: falta de financiamiento y salarios de pobreza. También los administrativos y los técnicos se ven obligados a buscar otros trabajos complementarios o a renunciar. La estructura administrativa del organismo está fuertemente erosionada, sobrecargando a los compañeros que se quedan y dificultando procesos cotidianos. Así, el vaciamiento del organismo es cuestión de tiempo.
Este año los trabajadores volvieron a la calle y declararon un paro. En asambleas regionales y en el plenario de delegados de Conicet se votó la convocatoria al paro. El gobierno, para frenarlo otorgó un aumento del 10% a investigadores y personal de apoyo, pero solo logró echar leña al fuego. Los administrativos del organismo, en una asamblea autoconvocada, decidieron extender el paro un día más. El gremio no respetó el mandato que surgió democráticamente de las instancias orgánicas de decisión y no declaró el paro ni a nivel nacional. Tampoco en CABA, como se había votado en la asamblea, donde se encuentra la mayoría del personal administrativo. Dejó sin amparo legal a los compañeros que querían parar. Actuó carnereando el paro. No obstante, la jornada de lucha de hoy se extendió por todo el país.
Los trabajadores y trabajadoras del CONICET necesitan una verdadera recomposición salarial. El surgimiento de organizaciones autoconvocadas es una muestra de que las direcciones gremiales están lejos de defender los intereses de los trabajadores del organismo. Actúan más bien defendiendo los de la patronal. No es casual que en las asambleas de autoconvocados participe más gente que en las del gremio, más bien es la consecuencia de la poca confianza que esta dirección gremial inspira. Los trabajadores de Conicet necesitan un CCT propio para negociar sus paritarias, pero si allí se sientan a negociar las mismas direcciones que hoy les dan la espalda, no hay mucho que esperar de una paritaria propia. Por eso, es importante seguir organizándose de forma independiente y dando la pelea dentro del gremio para tener una voz que realmente represente los intereses de los trabajadores en lugar de ser una correa de transmisión de la patronal.
Corriente Clasista Goyo Flores – Razón y Revolución Ciencia y Técnica