Ayer por la tarde se confirmaron los rumores de los últimos días: el Consejo Directivo Nacional de Atilra termina el año con otro intrascendente paro de actividades para presionar a la Cooperativa a que acepte firmar el fideicomiso acercado por el gobierno y sus empresarios amigos.
Ante las dilaciones y negativas, de SanCor, que vienen generando una falsa sensación de que hay avances y retrocesos en las negociaciones, Héctor Ponce tomó la iniciativa para acelerar los tiempos, exponer a los responsables de la empresa. De paso, también el gremio se cubre de la responsabilidad de tener a casi 1.300 trabajadores percibiendo solo una parte de su salario y a mas de 500 suspendidos, cobrando nada mas que $ 10.000 mensuales.
Está claro que la propuesta de la “burguesía Nac&Pop” cercana al ejecutivo y sobre todo al Ministro Kulfas ( Marcelo Figueiras, José Urtubey y Gustavo Scaglione, empresario de medios rosarinos), se dio por una necesidad del gobierno, que presionó para firmar un “entendimiento”, pero que es una iniciativa con fecha de vencimiento y que esta fecha la ponen los capitalistas. Por lo tanto si SanCor sigue jugando a las escondidas, todo el entramado puede caerse.
Ese entendimiento que se rubricó los primeros días de noviembre en el Ministerio de Desarrollo Productivo derivó en poco más de un mes en una foto y un preacuerdo firmado a las apuradas en la sede de Atilra en Sunchales. El proyecto de fideicomiso aportaría 60 millones de dólares, mientras que la empresa aportaría las plantas productivas, el Centro de Distribución de Don Torcuato y las marcas.
El motivo por el cual la operación no prospera no es otro que la nueva conformación del directorio de SanCor, que se conformaría con siete miembros: un representante de la láctea, uno de Atilra y cinco por los inversores. Es decir, el manejo quedaría en manos de estos últimos. No es un secreto que los actuales dueños de la cooperativa no van a aceptar que nadie tome decisiones por ellos. Lo cual ya han demostrado en los últimos años, al preferir el desguace de la empresa y la destrucción de miles de fuentes de trabajo.
Los trabajadores: Otro fin de año de angustia y miseria.
En un comunicado firmado por Trabajadores de SanCor, el sector de empleados auto convocados que viene luchando contra las suspensiones y los despidos, pero a la vez rechaza las maniobras burocráticas del gremio lechero, denunció la situación que atraviesan los obreros.
La denuncia señala a Ponce como responsable directo de los últimos cuatro años de pérdida de derechos, fuentes de trabajo y por la degradación de las condiciones de vida de todos los compañeros. También señala la complicidad del gobierno que ha desoído y cajoneado los reclamos de los trabajadores.
SanCor no tiene futuro en las condiciones que se plantean. Los actuales dueños siguen adelante con la reestructuración iniciada en 2017/2018. Esta tarea plantea principalmente reducir al mínimo el número de trabajadores e increíblemente, no pagar ni indemnizaciones, ni los retiros voluntarios en tiempo y forma. Los empresarios “amigos” vienen por lo mismo. De hecho, al inicio de las conversaciones que hemos relatado, se filtraron planes para despedir miles de compañeros y que el Estado se haga cargo de un miserable seguro de desempleo, al punto tal de que el sindicato tuvo que salir a decir que esto no sería aceptado. Como se ve los capitalistas solo ofrecen mas miseria en forma de desempleo, rebaja de salarios y perdida de derechos. A cambio sus ganancias se multiplican en los tiempos de acumulación o se mantienen a salvo, si la situación les es desfavorable. Siempre la clase obrera es la que paga con el deterioro de sus condiciones de subsistencia, las crisis de los patrones.
SanCor solo puede seguir siendo socialmente útil si el Estado interviene expropiándola y poniéndola a producir bajo el control de sus empleados. Para ello es necesario también, barrer con la burocracia enquistada en Atilra, que tranzó con los dueños de SanCor durante décadas (especialmente los últimos cinco años) y que ahora se juega a voltearlos, asociándose descaradamente con esta nueva burguesía nacional.
Trabajadores lecheros en la Corriente Clasista Goyo Flores.