Como venimos explicando en distintas oportunidades, la situación de los trabajadores temporarios gastronómicos y hoteleros es desesperante. La pandemia expuso la precarización laboral extrema por la que atraviesan. Pasados los 100 días de cuarentena y con la actividad turística paralizada, ni el gobierno nacional de Alberto Fernández ni el gobierno provincial de Arabela Carreras han dado una respuesta a su precaria situación.
Desde UTHGRA Bariloche, vienen llevando a cabo una serie de reclamos que incluyen la elevación de notas ante el Ministerio de Trabajo y el Ministerio de Turismo nacional con una nómina de trabajadores temporarios que no cobran el mísero IFE que otorga Nación. La respuesta del Ministerio de Trabajo de nación fue criminal. Mediante la Resolución 536/20 se decretó la ayuda económica de emergencia de unos miserables $20.000 a pagar en dos cuotas, en julio y agosto. Este miserable subsidio sólo alcanza a una parte de los trabajadores temporarios. La nómina presentada por el sindicato incluía a 2.279 temporarios que realizan sus funciones en 314 empresas hoteleras y gastronómicas. De esa nómina, el gobierno nacional solo validó a los temporarios de 83 de ellas. El resto, unos 814 temporarios no tendrá la posibilidad de cobrarlo y seguirán sumergidos en la miseria más extrema. Hay que tener en cuenta que hasta la fecha ningún temporario ha cobrado la ayuda económica, ya que el cobro del mísero subsidio está, a su vez, condicionado por el cambio de fase en la localidad, que pasó a incorporarse como una de las ciudades con Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio.
Frente a esta situación, el sindicato respondió con acciones directas, El viernes pasado, tuvo lugar una concentración en el Centro Cívico con quema de neumáticos. El lunes, en cambio, se movilizaron a la delegación del Ministerio de Trabajo de la Nación, en la calle Mitre, dónde entregaron un petitorio para que la ayuda económica llegue a todos los temporarios. De no recibir respuestas concretas, mañana miércoles cortarán el puente por el que atraviesa el río Limay, en la localidad vecina de Dina Huapi.
La gremial, sin embargo, a través de su representante Osvaldo Zúñiga, pretende que el gobierno flexibilice la cuarentena porque “está enfermando más que el virus”. La pandemia, como ya explicamos, no es la causante de la crisis económica, ésta viene de décadas de arrastre. La situación de los temporarios también es precaria en épocas de normalidad, ya que durante la temporada baja, dependen de changas para poder reproducir su vida y la de su familia. Y esto es responsabilidad de todos los gobiernos de turno. Ahora Alberto pretende soltarlos a su suerte. Y la conducción gremial, a pesar de los reclamos, proyecta enviarlos al matadero, si el sector turístico se reactivara, como ellos pretenden. La defensa irrestricta de la cuarentena junto a un subsidio igual a la canasta básica debe ser el reclamo principal, para que ningún trabajador temporario tenga que debatir su situación entre ir a trabajar arriesgándose a un posible contagio o morirse de hambre. Hay que tener en cuenta que el 1° de julio comienza formalmente la temporada y deben garantizarles al menos 45 días laborales con sus salarios completos. Aunque aún no hay respuestas sobre este punto.
La asociación Empresaria Hotelera Gastronómica (AEHGB), a través de su titular, Carlos Roccatagliatta, también se manifestó por la falta de respuestas del Gobierno Nacional y pidió que la ayuda económica para los trabajadores debería mantenerse hasta fin de año. Claro está que no les interesa la situación de los trabajadores realmente. Sólo buscan no perder sus ganancias desentendiéndose del asunto.
La situación de los trabajadores temporarios es alarmante. No cuentan al día de hoy con ninguna ayuda económica para paliar la situación de extrema pobreza que están padeciendo. El gremio, como vimos, avanza con los reclamos para el sector pero, acto seguido, pide flexibilizar la cuarentena y enviarlos al matadero. La respuesta del gobierno, por su parte, es criminal. Se desentiende del asunto y deja a miles de trabajadores en situación de extrema pobreza. Esa es la respuesta que tienen para darnos. No podemos permitir que esta situación siga como si nada estuviera pasando. Hay que tomar las calles hasta doblegar a la patronal y exigir la irrestricta defensa de la cuarentena y un subsidio a la desocupación.
Por una cuarentena sin despidos, suspensiones ni hambre.
Reapertura de paritarias y recomposición salarial
Subsidio universal al desocupado
Basta de subsidiar a las patronales
Que la crisis la paguen los capitalistas
Razón Y Revolución Río Negro
