Después de una caída salarial estrepitosa y una propuesta irrisoria por parte del Gobierno Nacional, que suponía un 15% a pagar en cuatro cuotas hasta mayo del 2021, ATE Nacional realizó su plenario nacional de delegados. Del mismo participaron casi 500 delegados y tuvo más de 5 horas de deliberación. Sin embargo, terminó en un escándalo que expuso el grado de connivencia de la burocracia con el Gobierno Nacional. Aunque afirman que rechazan la oferta, la realidad es que la burocracia de Cachorro y compañía se las arregló para boicotear cualquier tipo de votación de un plan de lucha, con el método del “consenso”. Es decir, cinco horas de deliberación para nada.
Pese a que varios delegados habían acercado numerosas propuestas, la conducción terminó impugnando cualquier iniciativa con su clásica fórmula de “Estado de Alerta y Asamblea». Y así, en todo caso, mañana el Concejo Directivo se encargaría de «evaluar» las medidas de protesta. Por supuesto, ya se preveía esta posición en las intervenciones de varios delegados de la burocracia, que planteaban que no se podía realizar acciones callejeras ni medidas de lucha. Pero, lo que resultó más escandaloso fue que para imponer su posición, la burocracia debió hacer caso omiso de las decenas de delegados que exigieron una votación. Incluso, Cachorro Godoy llegó al ridículo de “disculparse” por “no haber previsto un mecanismo de votación”. Una auténtica cargada.
Nuestra intervención puso de relieve la lucha de sectores como el de CONICET y la necesidad de recuperar todo lo perdido desde hace varios gobiernos, no solo el de Macri. Fue así que planteamos la necesidad de una recomposición salarial. Plantemos un aumento del 75%, para recuperar lo perdido en 2019 y 2020 y evitar mayores pérdidas. Pero señalamos que eso no compensa la pérdida salarial de la última década.
Ante el ajuste del Gobierno Nacional, la respuesta de ATE no se diferencia en nada de su par UPCN. En los hechos, ambos acompañan la política del gobierno. Ya habían guardado un silencio sepulcral ante el congelamiento salarial y ayer concurrieron sin pretensiones a la reunión paritaria. Por otra parte, las críticas de la Verde y Blanca a la conducción Verde de ATE Nacional esconden su rol de boicot a todas las luchas -como lo hicieron en CONICET- y su alianza con la patronal. De hecho, ni siquiera concurrieron al plenario a debatir, enchastrados en una interna faccional ajena a los intereses de los estatales. Se limitan a pedir un 25%, una suma también ínfima. Como se ve, todos ellos se casan con el gobierno –nuestra patronal- y le entregan nuestro salario servido en bandeja.
Es evidente que si queremos pelear por una verdadera recomposición salarial, solo las bases vamos a poder impulsar un plan de lucha. Si la conducción no va a mover un dedo, los trabajadores tenemos que autoconvocarnos y deliberar y resolver uno. Llamamos a todos los trabajadores, a las conducciones y agrupaciones que tengan voluntad deluchar por una recomposición salarial a aunar fuerzas y organizar la lucha conjunta. Hasta ahora, algunos sectores nos hemos movido de forma desarticulada. Es necesario coordinar esfuerzos para frenar el deterioro salarial que estamos sufriendo, al que nos conduce la política de la dirección del gremio. La situación amerita dejar de lado las divisiones y reunir la mayor fuerza posible.
Basta de ajuste. Recomposición Salarial YA
Corriente Clasista Goyo Flores – Corriente Sindical Clasista
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