Los trabajadores de la salud chaqueños sumaron una muerte más. Ocurrió el sábado en la localidad de Sáenz Peña. Se trata de la enfermera Mónica Moyano de 33 años de edad. Estaba internada desde el 16 de junio por dificultad respiratoria por neumonía severa. Luego se confirmó infección por COVID -19. Mónica, era personal de la Unidad Médica de la UNCAUS (Universidad Nacional del Chaco Austral) de la ciudad termal.
Hace poco más de dos semanas, murió el médico del hospital Perrando, Miguel Ángel Duré. Ambos muertes son el resultado de un denominador común: escasos e inadecuados elementos de protección sanitaria. Situación que médicos, enfermeros y todo el personal médico, siguen reclamando. Si esto sigue así, no solamente va a colapsar el sistema sanitario, sino que no habrá personal suficiente. Además, se siguen sumando las protestas por la precarización laboral, las condiciones de trabajo y por el pase a planta.
Esto no es nuevo. El sistema de salud de Chaco viene degradándose hace décadas. Por más que ahora la oposición radical al gobierno de Capitanich quiera hacer leña del árbol caído. Ellos también son responsables de la crisis sanitaria. Ni que hablar de los últimos años del peronismo – kirchnerismo. Capitanich es hoy el máximo responsable de la profundización de la precarización laboral en salud.
Sin dudas estamos ante un nuevo crimen social del capitalismo. El responsable es el personal político que maneja los hilos del Estado. Es decir, el gobernador Capitanich y la ministra de salud Paola Benítez. Hoy más que nunca, debemos acompañar la lucha de los trabajadores de la salud, exigiendo:
– Repudio por el crimen social de Mónica Moyano. Capitanich y el Estado son responsables.- Licencias para todo el personal de riesgo.
– Por una política para cubrir la falta de personal y más capacitaciones.- Pago inmediato y aumento del bono para todos los trabajadores de los hospitales, puestos sanitarios y centros de salud de toda la provincia.
– Reapertura de las paritarias y una recomposición del salario.- Pase a planta de todo el personal precarizado, fundamentalmente de los médicos residentes y del programa “Expertos”.
– Por un sistema de salud centralizado y bajo control de los trabajadores para hacer frente a la pandemia.
Razón y Revolución Chaco