En la última reunión de Junta Interna y Cuerpo de Delegados de ATE CONICET Capital se produjo un atropello que no podemos dejar pasar y es necesario denunciar. Nuestro delegado por la minoría fue cuestionado a raíz de un comunicado en el que discutíamos decisiones de la Junta, luego de dar un debate interno. No fue un cuestionamiento al pasar, sino que se lo propuso como punto del temario y se le dedicó al tema cerca de 40 minutos de la reunión. Los argumentos con que se cuestionó nuestro comunicado, y la actuación de nuestro delegado, fueron de lo más variados: desde que no podíamos hacer públicos debates y posiciones volcadas en la reunión de JI, hasta que en tanto ahora integrábamos el Cuerpo de Delegados, no podíamos cuestionar públicamente decisiones de la Junta.
Vale aclarar que nuestras diferencias con la actual conducción de ATE CONICET Capital no son nuevas. No es la primera vez que cuestionamos su accionar, y es la razón por la que integramos una lista opositora en las últimas elecciones internas. Por otro lado, las decisiones que discutimos en el comunicado que ahora es motivo de ataque no son menores, sino que apuntan a la forma en que el sindicato interviene frente al principal conflicto que enfrentamos hoy los trabajadores del CONICET y todos los estatales: la ofensiva gubernamental para imponer el ajuste, que está dejando cientos de compañeros sin trabajo. En aquel comunicado señalamos que nuestro sindicato tenía que ponerse a la cabeza de la lucha de los compañeros despedidos, convocando tanto a la asamblea de Ciencia y Técnica que se realizó hace unos días, como a una asamblea del gremio a la brevedad. La negativa a hacerlo, implicaba abandonar esa lucha. No estábamos ventilando ningún secreto de estado ni develando posiciones que no fuera públicas: ATE no convocó a la asamblea de CyT, y la asamblea de afiliados del gremio recién se realizará a principios de marzo. Los argumentos esgrimidos en la Junta Interna por quienes se oponían a convocar a esas instancias fueron los mismos que el día anterior se expresaron públicamente en una asamblea en Saavedra 15. ¿Qué de esto no se podía decir? No podemos dejar de relacionar esta actitud, que busca acallar a la oposición y que no puede caracterizarse de otra forma que de burocrática, con el ataque que nuestra lista sufrió por parte de la patota de la Verde y Blanca el día de la elección.
Más allá de eso, creemos que hace a la democracia sindical que lo tratado en la Junta Interna tenga un carácter público. Es más, sería positivo que luego de cada reunión se realice un informe que se circule a los afiliados, ¿o acaso hay algo que ocultar a las bases? Lo que en realidad molesta no es eso, sino que se haya estructurado una oposición dentro de ATE CONICET. Una oposición que no renuncia a sus demandas pasadas las elecciones, sino que pretende seguir dando batalla en pos de construir un gremio democrático y combativo, tanto dentro de la Junta Interna como de cara al conjunto de los trabajadores del sector. En eso estamos y en eso seguiremos.
