El domingo por la madrugada, un grupo de 10 policías ingresó sin orden de allanamiento a una vivienda del barrio Banderas Argentinas de la localidad de Fontana.
En la redada, fueron golpeadas y detenidas 4 personas. Mientras que otra mujer, recibió un culatazo en la cabeza por parte de uno de los efectivos.
Los cuatro jóvenes detenidos, dos mujeres y dos varones, fueron trasladados a la comisaría Tercera de la misma localidad, donde los siguieron golpeando salvajemente mientras los rociaban con alcohol y amenazaban con prenderlos fuego. Todo esto mientras los insultaban y acusaban de propagar el Covid – 19. Inclusive, dos de las mujeres detenidas (una de ellas menor de edad), denunciaron que fueron abusadas sexualmente por uno de los policías.
Si bien todos los policías fueron separados del cargo y el Estado es parte querellante en la causa, la responsabilidad política sigue siendo de Capitanich. Quien de hecho, en su anterior gestión, carga con la muerte de los dirigentes Mártires López y Ángel Verón. El primero, murió dudosamente en un «accidente», que aún no ha sido esclarecido. El segundo, murió esposado en la cama de la hospital Perrando luego de una brutal represión a desocupados que reclamaban por viviendas y subsidios.
Exigimos una comisión independiente de organizaciones obreras para que investigue los hechos y exigir el cese de la represión a las fracciones obreras pauperizadas que son condenadas al hambre y la miseria que se profundiza en este contexto de pandemia. La investigación no puede quedar a cargo del OCI (Órgano de Control Institucional) de la Policía y de la Secretaria de DDHH, quien demoró dos días para tratar de encubrir a Capitanich y para que este hecho quede totalmente impune.
Razón y Revolución Chaco
