El ajuste que está llevando adelante el gobierno tocó un área sensible de salud: el Fondo de Redistribución Solidaria, que sufrió un ajuste de $10 mil millones. El recorte implica que los trabajadores que atienden a los pacientes con discapacidad de las obras sociales estén sin cobrar los tres meses que se les adeudan. De esta forma se deja en una situación crítica la atención de un sector particularmente vulnerable de la clase obrera.
Nuevamente, queda en evidencia el desprecio por parte del Estado hacia la situación de la población con discapacidad y de la salud de la clase obrera en general. Además, se muestra que el sistema de obras sociales no resulta eficaz para atender la salud obrera, y que es necesaria su reformulación, junto con todo el sistema de salud.
Nos solidarizamos con los trabajadores que están reclamando sus pagos y exigimos no solo que se restituya el presupuesto, sino que el mismo sea aumentado para afrontar la creciente inflación. Mientras el gobierno está embarcado en la defensa de la vicepresidente por la cusa de corrupción, el ajuste sigue su curso. Es necesario que nos organicemos para frenarlo.
Trabajadores de salud en la Corriente Clasista Goyo Flores – Corriente Sindical de Razón y Revolución
