Fue una científica austriaca que investigó en radiactividad y en física nuclear. Formó parte del equipo que descubrió la fisión nuclear, un logro por el cual su amigo y colaborador Otto Hahn recibió el Premio Nobel. En 1938 tuvo que huir de Alemania hacia Estocolmo, perseguida por el nazismo. Proporcionó la primera explicación de la fisión nuclear del uranio en términos de física teórica. Su caso es uno de los ejemplos más claros en donde el comité del Premio Nobel ha pasado por alto a una mujer autora de un hallazgo científico de primera línea, queentre otras aplicaciones, dio lugar a reactores para la producción de electricidad, a las armas nucleares empleadas en la Segunda Guerra Mundial y a la medicina nuclear. El elemento n.º 109, meitnerio, fue nombrado en su honor.
ESI y el borrado de las mujeres – Rosana López Rodriguez
Compartimos la participación de nuestra compañera Rosana López Rodríguez de Trece Rosas en la mesa debate