Por Florencia Rodríguez
La OCPO, Organización Comunista Poder Obrero, surge de la fusión de varias pequeñas y medianas agrupaciones de Buenos Aires, Córdoba, Rosario y La Plata. ORPO Rosario, El Obrero de Córdoba, una agrupación de Tucumán y Jujuy de Héctor Martó, MIR de Bs. As., Acción Comunista de Bs. As. y Córdoba, Lucha Socialista de La Plata, de Luis Rubio, un grupo de Mendoza de Ortega Peña y FAL 22, son las que conforman la organización. En 1975, en los albores del golpe militar e inmersas en el proceso de coordinadoras obreras, se realiza finalmente la unión de todas estas agrupaciones, que venían discutiendo y actuando en consonancia desde el Cordobazo.
Se plantean como alternativa superadora de lo existente: de Montoneros, porque éstos entienden la situación como derrota histórica de la clase obrera (a causa de la muerte de Perón) atribuyendo a las coordinadoras una función coyuntural (luchar por la hegemonía dentro del movimiento peronista); del PRT, porque se ha desvíado hacia el militarismo, habiendo dejado de construir, en la practica, el partido de la clase. De ahí la necesidad de una tercera opción socialista revolucionaria, que sería OCPO, donde la construcción del Partido junto con una línea de masas, serán el eje político. En tanto sus acciones y política giran en torno a la acción sindical para la organización política de la avanzada proletaria, con el objetivo estratégico de la dictadura del proletariado, se trataría también de una superación del estrecho sindicalismo de los grupos “clasistas”. En ese cuadro, el brazo armado era funcional y estaba subordinado a la política. No negaban la necesidad de acciones armadas –aunque sí la del foquismo, considerándolo inapropiado para la situación nacional- sino que discutían con el resto de las organizaciones el lugar que ésta debía ocupar no sólo teóricamente sino en la práctica:
“La discusión se centró entonces, en la política de desarrollo de la lucha, donde la violencia armada aparecía desde el comienzo, impuesta por el grado mismo de profundidad del conflicto mismo (y no importada por los “ultras”) De lo que se trata, entonces, es de articular dialécticamente en una política definida, las formas de violencia de la vanguardia revolucionaria, con los niveles de violencia efectivamente alcanzados por la lucha de clases, en cada momento, el grado diferenciado de conciencia que tiene la avanzada y el conjunto de las masas acerca de la necesidad de la violencia… No ha sido la lucha armada la que ha aislado a algunas organizaciones de las masas, sino la desviación militarista, que consiste en hacer de la lucha armada la lucha política misma en una fase del proceso que todavía no alcanza el nivel superior de la lucha de clases definido como guerra revolucionaria.”1
Historia de la organización
Cada uno de las agrupaciones que integran OCPO tiene una larga historia. Éstas, en general, habían comenzado a funcionar a fines de los años ’50 y principios de los ’60, inicialmente discutiendo política y teniendo un accionar reducido a universidad, villas y algunos sindicatos. Asimismo, muchos de ellos habían comenzado tempranamente a militar en el Malena (experiencia que parece muy importante) y luego de su disolución continuaron activando en otros lados, pero había entre todos ellos, según Dardo Castro, una red de contactos de la cual surgiran muchos de los que terminarán militando en OCPO:
“Éramos un grupo local vinculado a otros grupos locales. Algunos de nosotros habíamos militado en el Movimiento de Liberación Nacional, MLN- MALENA le decían en la jerga- fundado por los hermanos Viñas y Pico José Vazeilles. Ese grupo fue el primer grupo de izquierda, marxista, en la Argentina, que se planteó la apertura al peronismo. Fue el primer intento, digamos. Era un grupo fundamentalmente intelectual, algunos eran unos intelectuales brillantes. Yo tenía 17 años y participé de un año de eso, porque después se disolvió. (…) Pero ahí queda toda una red nacional de gente que participó del MLN y que retomamos el contacto. Es sorprendente cantidad de gente que uno se entera hoy que estuvo en el MLN y que fue a parar a muchos otros lugares … León Rozitchner, los hermanos Viñas … la gente de la revista literaria El escarabajo de oro …”
El Obrero, por ejemplo se fortalece en 1966 a partir de las protestas estudiantiles contra el gobierno de Onganía. Dardo Castro –militante de El Obrero y OCPO- lo describe:
“Era un grupo de obreros y estudiantes, algunos profesionales, que repartían, discutían, analizaban con mucho nivel teórico, -fue un período de mucha formación intelectual, tuvimos tiempo, después ya no se pudo hacer eso, ya después del Cordobazo… ya la militancia, digamos (apareció Althusser, alrededor del ‘70 empiezan a llegar los franceses, los italianos, Rosa Luxemburgo, que era poco conocida, la introduce la editorial La Rosa Blindada, se comienzan a conocer textos muy importantes de la tercera internacional. Todo esto reaviva el debate, se incorporan al debate otras experiencias)… El Obrero, era un grupo que funcionaba alrededor de ese periódico, que hacía pedagogía.”2
Alicia, militante de Lucha Socialista y de OCPO –esposa de Luis Rubio-, cuenta como luego de una primera aproximación fallida al foquismo deviene en hacer trabajo en villas y sindicatos donde principalmente hacían agitación:
“Es decir, no había posibilidades de hacer otro tipo de trabajo. Tampoco había coyuntura electoral, no teníamos inserción, nosotros hablábamos del problema del trabajo, pero el problema era la represión.”3
Estos dos ejemplos son exponentes de los grupos que compondrán OCPO. Sin embargo, la situación cambia vertiginosamente con el Cordobazo. Punto de inflexión para la historia argentina de la época, este hecho repercute directamente en todas las organizaciones del período. La caracterización de lo ocurrido, las medidas a seguir, la repercusión que tuvo no sólo para el conjunto de las masas y la clase obrera sino el reacomodamiento que implicó para el régimen fueron temas harto discutidos entre las organizaciones. Para 1971 el Encuentro Nacional de Obreros Revolucionarios organizado por SITRAC-SITRAM será el lugar que cobijará todas estas discusiones. En 1972, El Obrero edita un documento polarizador sobre el carácter de la revolución, polarizando con PRT, Política Obrera y Socialismo Revolucionario. Un segundo momento de discusión de estos grupos es en torno a la cuestión electoral del 1973. En un documento interno fechado en 1977 de la Organización Comunista Poder Obrero explican que:
“El 11 de marzo, y por primera vez en la historia argentina, las masas votan objetivamente (cualquiera fuera la forma que tomara su conciencia en ese momento), por la inestabilidad permanente del sistema, en la medida que sus reivindicaciones, por las que luchaba, se oponían antagónicamente con las aspiraciones que Perón personificaba, y que el peronismo daba configuración programática. El elemento superador de esa contradicción… era precisamente la NECESIDAD.”4
Nuevamente la discusión teórica y la practica zanjan posiciones entre éstas organizaciones, Montoneros, PRT-ERP y la “nueva izquierda”. Las fuerzas que apostaron en aquel sentido saldrán fortalecidas de este proceso, aunque todavía dispersas y sin un programa que capitalice lo que ellos consideraban sus “aciertos”.
Para 1974, encontramos el embrión de OCPO en la fusión de El Obrero y ORPO al que se suman los grupos de Jujuy y Tucumán. Un año más tarde, se incorporarán Lucha Socialista y Acción Comunista, conformando finalmente el OCPO. El proceso de coordinadoras bonaerenses y de Villa Constitución así como las movilizaciones de masas contra el gobierno contarán con una participación activa de la organización.
“Las Coordinadoras obreras se erigieron en organismos populares de dirección obrera, pero resultaron incapaces de señalar un objetivo político superador de la crisis generalizada. En junio la clase obrera se enfrentó al vacío de poder… pero carecía de una alternativa propia que ocupara su lugar, ni había desarrollado el frente necesario para imponerla al conjunto del país. En esta situación, el golpe militar aparecía como terrible amenaza, y existía resistencia a seguir avanzando sin más perspectivas que precipitarlo… es responsabilidad directa de las fuerzas que dirigieron el movimiento. Ninguna fue capaz de asumir la vanguardia política del proceso: Montoneros por circunscribirlo a su lucha contra el lopezrreguismo, y OCPO sin la fuerza necesaria aún para erigirse en Partido.”5
Lo que el golpe del 24 de marzo de 1976 debe frenar brutalmente es este proceso de ascenso en las luchas y la organización del proletariado y las masas, imponiendo de hecho los intereses de la oligarquía financiera. OCPO reclama crítica y autocrítica mientras la amenaza de fracturas es cada vez mayor. El intento de coordinación con Montoneros y PRT no logran llevarlo a cabo por la caída de la dirección del ERP. La propuesta era la conformación de un Frente único de Resistencia Antidictatorial con hegemonía proletaria. Para mayo del ’76 encontramos que OCPO figura entre las tres organizaciones político-militares más importantes:
“La actividad subversiva en el país continúa dinamizada a través de tres OPM principales: Montoneros, PRT-ERP y OCPO; cuyas estrategias y objetivos si bien no son esencialmente iguales, llegan a ser coincidentes y complementarios, dando lugar a un accionar conjunto en el campo táctico, lo que aumenta su eficacia… El Ddo Z Def 1 y el Cdo Z Def 4 intensificarán gradual y aceleradamente la acción antisubversiva a partir de la recepción de la presente orden y a medida que se reestructuren las jurisdicciones territoriales y se adecuen las respectivas organizaciones con la finalidad de completar el aniquilamiento del oponente en la zona donde mantiene mayor capacidad.”6
El 24 de mayo de 1977, en la localidad de Monte Grande aparentemente se iba a realizar una reunión entre OCPO, FAL/22, ERP, Montoneros y el movimiento revolucionario CEE, que fue interceptada por el comando de la zona, llevándose prisioneros a muchos altos dirigentes de estas organizaciones, secuestrando documentación e informaciones varias entre las cuales había manuscritos en donde constaba la composición de OCPO y FAL/22, así como la invitación al resto de los participantes de las demás organizaciones.7 En el período que va entre 1977-1978 como consecuencia de las acciones armadas OCPO fue fuertemente reprimida, sufrió serias bajas y cesaron sus actividades.
El Programa
Un programa político no solamente es palabras plasmadas en un papel, sino más bien hechos-palabras, teoría y praxis. En este momento inicial de la investigación y considerando la inexistencia de producción historiográfica respecto del OCPO, los datos recabados son esencialmente documental interno a la organización y entrevistas a militantes. Por esto presentaremos una aproximación a lo que pareciera ser el programa político que OCPO dice encarnar. A lo largo de un extenso documento interno de 98 páginas, encontramos caracte-rizaciones particulares de la historia Argentina, de sus instituciones, de su proletariado y burguesía, las relaciones internacionales y profundas discusiones de estrategia con Montoneros y PRT-ERP. La primera definición gira en torno a la Argentina, se trata de un país capitalista dependiente del imperialismo, por lo tanto, el carácter de la revolución es socialista. En segundo lugar, la concepción vanguardia-masas:
“La tarea de consolidar el campo socialista a nivel de masas es una tarea simultánea a la construcción del Partido, porque ambas son estratégicas para conquistar la emancipación del proletariado. Una y otra suponen la existencia de formas políticas singulares, pero combinadas comportan la base necesaria para el surgimiento de la alternativa obrera en cualquier circunstancia del proceso revolucionario.”8
Asimismo, en la política sindical sigue claramente una línea leninista de máxima re-sistencia en cada momento, colocando a los sindicatos en el seno del movimiento obrero pero independiente política e ideológicamente del Estado. Es decir, la prefiguración de una conciencia política independiente, con un correlato en ámbitos organizativos que galvanice el nivel de acumulación de fuerzas alcanzado. En constante discusión con el resto de las organizaciones del momento, este marxismo revolucionario aportó para saldar debates con el espontaneismo. Por último, retomando los planteamientos iniciales respecto de la toma de armas, el rol de la vanguardia está necesariamente ligado a la lucha armada en este contexto del desarrollo del capitalismo mundial, la construcción del Partido Revolucionario está indisolublemente ligada a los embriones de Ejército Revolucionario.
Las acciones
Según Daniel Pereyra “Buena parte de los militantes de OCPO eran activistas sindicales, y se afirma que llegó a contar con unos 1,000 de los cuales 100 componían el aparato militar.”9 No tenemos datos certeros para comprobar tal afirmación. Sin embargo sabemos que desde su nacimiento, OCPO ocupó un papel importante en las luchas obreras, y jugó un rol decisivo junto a PRT-ERP y Montoneros en tanto resistencia armada. A lo largo de 1975 en el proceso de coordinadoras obreras, tuvo un rol protagónico en Villa Constitución y un lugar central en las coordinadoras bonaerenses, aunque no alcanzó un desarrollo sustantivo como organización para imprimirle al proceso una dirección.
En cuanto a las acciones armadas, en “Foro de la Verdad Histórica, Listado Cronológico de los principales atentados y ataques terroristas ocurridos entre 1969 y1979”, un sitio de Internet de extrema derecha, contabilizamos las siguientes acciones:
21/10/75 OCPO, asesinato del Dirigente Gremial Ricardo Sánchez.
22/12/75 OCPO, atentado con explosivos contra el edificio de la financiera FINANDFORD, en la Capital Federal.
11/02/76 OCPO, asesinato del Jefe del Grupo de Artillería Antiaérea de Mar del Plata, Coronel Rafael H. Reyes en la ruta a Camet. Es rematado por una terrorista mujer de 24 años de edad, recibiendo más de 50 disparos de ametralladora; son heridos los soldados conscriptos Gómez y Tempone, acompañantes del coronel.
21/02/76 OCPO, asesinato de un activista gremial peronista de ACINDAR, en Villa Constitución.
30/05/76 OCPO, secuestro del Coronel del Ejército D. Juan Pita, en Gonnet, Prov. De Bs. As. Fue infrahumanamente alojado en un pozo (“cárcel del pueblo”) durante meses. Condenado a muerte mediante la parodia de un “juicio revolucionario”, siendo sometido a innumerables simulacros de asesinato. Se fugó en diciembre, luego de 192 días de secuestro, habiendo perdido más de 15 kilos de peso.
11/06/76 OCPO, atentado con explosivos, secuestro y posterior asesinato del Ejecutivo de empresa financiera, JULIO A. ONETO.
14/06/76OCPO, secuestro extorsivo del Ejecutivo de empresa financiera, Carlos Macri. (rescate 750,000 dólares)
14/06/76 OCPO, asesinato del Ejecutivo del INTA, Ingeniero Pedro Etchevare.
10/10/76 OCPO, asesinato del Gerente de la empresa IKA RENAULT, Domingo Lozano, en Córdoba.
22/10/77 OCPO, asesinato del Ejecutivo de la empresa MASSALIN Y CELASCO, Ingeniero José M. Martínez.10 Los compañeros caídos citados por Daniel Pereyra son: Jorge Camillón, Raúl Ticera, Carlos Alberto Fessia, Luis Honores, Juan Cardozo, Julio Palacios y Guillermo Barros.
Notas
1 Documento mecanografiado-Dos partes, S/A, S/F (en el interior del documento especifica que se trata del año 1977,p.55), p.14-15.
2 Entrevista grabada en casete TDK 60minutos lado A, S/F, Información en tapa de casete: DARDO CASTRO. ENTREVISTA REALIZADA POR: OCPO; en lápiz negro: Rául (SIC); información sobre el casete “OCPO- Entr. a D. Castro”.
3 Pozzi, Pablo y Schneider, Alejandro; Los Setentistas. Izquierda y clase obrera: 1969-1976, Eudeba, Bs.As., 2000, p. 385.
4 Documento mecanografiado. Dos partes, S/A, S/F(al interior del documento especifica que se trata del año 1977, p. 55), p 27.
5 Ibíd.. p. 32.
6 Orden Parcial nro 405/76: Reestructuración de jurisdicciones para intensificar las operaciones… SECRETO, Copia s/ nro, Cdo Grl Ej (EMGE-Jef III- Op), Buenos Aires, 211800 May 76, CPM-234.
7 Ver: www.studiperlapace.it “Sentenza di condenna del generale Cralos Guillermo Suárez Mason, del generale Santiago Omar Riveros e altri per i crimini contro i cittadini italiani nella Repubblica Argentina”, 6 de diciembre de 2000, Roma, p. 37.
8 S/A; Para un Balance de la organización revolucionaria Comunista Poder Obrero, Introducción, Mecanografiada, S/F, p, 3.
9 Pereyra, Daniel; Del Moncada a Chiapas. Historia de la lucha armada en América Latina, Libros de la Catarata Madrid,1994, p. 88.
10 Todas las acciones han sido transcriptas literalmente de la fuente, obviando acciones armadas de otras organizaciones.