El proyecto para legalizar el aborto fue una promesa de campaña y uno de los grandes anuncios en la Asamblea Legislativa cuando Alberto Fernández abrió, el 1° de marzo pasado, las sesiones ordinarias en el Congreso. Según el presidente, el lunes 9 de marzo ingresaba el texto en el palacio legislativo.
La promesa del proyecto fue uno de los temas centrales de las asambleas de mujeres para la organización de la marcha del 8M. Esta novedad de Fernández termina de romper lo único que sostenía la presencia de todos los sectores en esos encuentros. El protagonismo de la Campaña y la consigna por el aborto legal, libre, seguro y gratuito, pasaba a un segundo plano. El proyecto verde, ese que todas conocemos y militamos ya no era la bandera principal. Las organizaciones oficialistas se ocuparon de diseñar e imponer una jornada que le sacaba presión a su gobierno y creaban el clima para la aceptación del proyecto que Fernández pactó con el Papa.
Muchas organizaciones pusimos en cuestión esta situación, sostuvimos un pañuelazo en Plaza de Mayo el 8 de marzo y el lunes 9 marchamos exigiendo que el proyecto que se debía tratar era el nuestro, el de la Campaña. Pero ese día el proyecto no llegó al Congreso y las mujeres seguimos sin saber de qué se trata. Lo demás es historia conocida, estalló el coronavirus en el país y entramos en cuarentena. Al poco tiempo, ambas cámaras reanudaron su actividad pero del aborto ni noticias.
Hoy nos encontramos con que todos los portales de noticias comentan que: el proyecto del aborto legal, seguro y gratuito está listo hace unos meses, pero el Presidente decidió postergar el envío del texto al Congreso por una razón: el crecimiento de los contagios por COVID-19 en el país. Al parecer la decisión ya está tomada y es posible que el proyecto sea tratado recién el año próximo. Alberto Fernández y Vilma Ibarra analizaron la estrategia y concluyeron que “No es el momento”. La Secretaría de Legal y Técnica dijo que “Estamos con 7500 contagios por día, no podemos plantear ahora el debate del aborto y ponerle más presión al sistema de salud”. Y que la razón por la que acordaron postergar el debate es porque el ministro de Salud, Ginés González García, y la secretaria de acceso a la salud, Carla Vizzotti, están dedicados a la pandemia y no podrían sumarse al debate del aborto en este contexto.
Además, la mesa chica del poder, que integran Máximo Kirchner (jefe del bloque de diputados oficialistas), Sergio Massa (presidente de la Cámara de Diputados), Santiago Cafiero (jefe de Gabinete) y Eduardo “Wado” de Pedro (ministro del Interior) tienen en claro que no pueden abrir en el Congreso otro debate ¿polémico?, excusándose en que implicaría movilizaciones en las calles en tiempo de distanciamiento social, lo que sería de alto riesgo sanitario.
Al parecer, tratar desde el 23 de junio los proyectos por el cupo laboral travesti-trans es menos polémico que el aborto. El gobierno decide avanzar con una ley que divide al conjunto de la clase obrera, como bien se expresa en este petitorio y dejar de lado una demanda en donde está en juego la vida o muerte de las mujeres obreras. Sin ir más lejos, ayer en Junín, provincia de Buenos Aires, comenzaron las investigaciones para averiguar si una mujer de 40 años murió a causa de un aborto clandestino.
Ya lo hemos dicho mil veces, los gobiernos burgueses no están interesados en solucionarle los problemas a la clase obrera. Es por eso, que se dedican a cajonear nuestras demandas y concretar de espaldas a la sociedad aquellas medidas que nos dividen y debilitan.
Es por eso, que una vez más salimos a decir que mientras vivamos en una sociedad capitalista, en donde la reproducción social de la vida cae sobre los hombros de las mujeres, somos nosotras las que decidimos si nos queremos hacer cargo o no. No queremos nuevos proyectos, queremos el de la campaña por sus dos puntos positivos: su carácter voluntario, nadie nos tiene que preguntar por qué queremos hacerlo; y su carácter gratuito, que nos da la garantía de abortar y en condiciones seguras a las mujeres obreras. Las feministas exigimos: ABORTO LEGAL, LIBRE, SEGURO y GRATUITO.