Como mostramos el fin de semana, a partir de los casos de CABA, Provincia de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, y Mendoza, el retorno a la presencialidad trajo aparejada la segunda ola. El aumento en los casos a nivel general, pero sobre todo el aumento de los contagios entre la población en edad escolar, muestra que las escuelas son grandes focos de contagios de la enfermedad. Ahora, damos a conocer la evolución de los casos en la población escolar de entre 6 y 18 años para las provincias de Catamarca, Chaco, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Jujuy, La Pampa, La Rioja, Misiones, Río Negro, Salta, San Juan, San Luis, Santiago del Estero, Tierra del Fuego, y Tucumán. Todas estas provincias presentaron subas en los contagios dentro de esta fracción etaria.
En Catamarca, a solo un mes de comenzar las clases, el gobierno debió suspender la presencialidad en 4 departamentos. En Chaco, luego que los gremios levantaron la huelga aceptando la oferta salarial de Capitanich, los casos se triplicaron. En Corrientes, la suba fue del 516% desde el retorno a la presencialidad. En Entre Ríos, a pesar de que se realizaron 7 días de paro, los casos se multiplicaron por 6. En Formosa, los casos provinciales se multiplicaron por 10. La suba para la provincia de Jujuy fue de un 238%, en La Pampa de un 291%, en La Rioja los casos subieron 10 veces, en Misiones se duplicaron, en Salta se quintuplicaron. En San Juan, los casos se multiplicaron por 20, mientras que San Luis no venía registrando casos en estas edades y se volvieron una constante desde el retorno a la presencialidad. En Santiago del Estero, se multiplicaron por 6 los contagios. En Tierra del Fuego, los casos crecieron un 250%, mientras que en Tucumán el crecimiento fue del 238%. En Río Negro, los casos crecieron mucho durante las vacaciones de verano, tratándose de una de las provincias que mayor turismo recibió, y ahora comenzó nuevamente a producirse un crecimiento de los casos acercándose peligrosamente a esos valores.
Ya lo dijimos: estamos frente a una problemática a nivel nacional. De allí que, como Corriente Nacional Docente Conti Santoro, cuestionamos la medida de suspensión de la presencialidad tomada hace 10 días por Alberto Fernández, por ser escasa temporal y geográficamente. Lo primero, porque solo se limita a 15 días, plazo insuficiente y que solo puede llegar a servir amesetar el crecimiento. Lo segundo, porque solo se limita a un espacio particular, el AMBA, y no tomando el problema en su escala real, a saber, como un problema salud pública nacional. Más aún, cuando en CABA dicha medida no se implementó, y cuando incluso regiones bonaerenses como Bahía Blanca o General Pueyrredón, están en situación crítica, aunque mantienen abiertas las escuelas. Más limitada es, cuando nos enteramos que a partir del 30 de abril, el gobierno nacional se propone avanzar hacia una “presencialidad administrada” que es una reedit de la “presencialidad cuidada” de principio de año.
Como Corriente Nacional Docente Conti Santo, consideramos que es inadmisible el retorno a cualquier tipo de presencialidad sin vacunación masiva. Los datos acá presentados, junto a los que ya difundimos anteriormente, muestran que la presencialidad educativa, que implica necesariamente una mayor circulación y el aumento de casos en una población probablemente asintomática como son los niños, niñas y adolescentes, trae aparejado el crecimiento generalizado de los contagios. Para más, estamos hablando de una presencialidad absolutamente degradada, dividida en dos, tres, o cuatro burbujas semanales, que hacen repetir la misma clase y el mismo tema ante cada burbuja, alumnos dispensados a la deriva por la falta de docentes que puedan trabajar con ellos en la virtualidad, la imposibilidad de la bimodalidad y las clases sincrónicas por la falta de conectividad en las aulas y la sobrecarga del trabajo docente que contrasta con la enorme cantidad de docentes sin cargo que hay en el país. No podemos permanecer inactivos frente lo que es un crimen sanitario, pero que también es un crimen pedagógico.
Si el gobierno quisiese, se podría tener una educación virtual de calidad, trabajando con todos los alumnos semanalmente, haciendo un seguimiento particularizado de aquellos que presentan mayores dificultades, y sin tener que descargar en las familias, y específicamente en las madres, el seguimiento del proceso educativo de los estudiantes. Por eso, como Corriente Nacional Conti Santoro, convocamos a todos los gremios combativos, a todas las corrientes sindicales y políticas docentes, a todos los docentes independiente que se levantaron contra la presencialidad, a iniciar una campaña nacional por la suspensión de clases en todo el país hasta la vacunación masiva de la población, y exigir que mientras tanto se garanticen equipos, conectividad, dispensas, personal, ingresos para las familias, y todo lo necesario para el sostenimiento de una educación virtual de calidad.
Corriente Nacional Docente Conti Santoro