“Por el cansancio, ves un medicamento y pensás que es otro”
Entrevista a enfermeros de hospitales públicos
Nicolás Viñas
TES-CEICS
Los hospitales públicos porteños están cada vez peor. Los perjudicados siempre son los mismos: los trabajadores. No sólo los pacientes que no tienen una buena obra social. También el personal que allí atiende. Lea esta nota y conozca la situación de los enfermeros.
El 6 de junio de este año, el gobierno de Macri sancionó el Decreto n° 260, que propone una reestructuración del actual modelo de hospital público afectando a los trabajadores de la salud. Entre los más perjudicados se encuentran los enfermeros, ya que la normativa modifica las estructuras vigentes y pone a todo el sector dentro de una gerencia operativa, bajo la órbita de un subdirector médico. En este marco, los enfermeros vienen movilizándose con acampes frente a la jefatura de gobierno, volanteadas y marchas. Se destaca en particular la movilización del 29 de agosto, donde confluyeron residentes, concurrentes, trabajadores sociales, técnicos y administrativos, con una participación de aproximadamente 700 personas. Aquí, reproducimos extractos de entrevistas a enfermeros nucleados en la Asociación de Licenciados de Enfermería para indagar sobre las condiciones laborales del gremio: Viviana Ramírez (presidenta), Iván Sotomayor (secretario gremial y jefe de enfermeros del hospital Álvarez), Miguel Cobacho y Claudia Betes [1].
¿Qué tareas realiza un enfermero?
Iván Sotomayor (IS): El objeto de cuidado del enfermero fue variando en la historia. Hoy, un enfermero es un profesional de la salud que se ocupa no solamente del cuidado de los enfermos, sino también de las personas sanas, de la familia, del binomio madre e hijo. Estamos habilitados para hacer educación para la salud en las escuelas, prevención de accidentes y manejo de primeros auxilios. Hay muy pocos enfermeros trabajando en atención primaria y esto se nota. En las escuelas y jardines de infantes directamente no suele haber enfermeros. Uno deja sus hijos en un jardín maternal y si el chico hizo una convulsión por fiebre, si tuvo un accidente o algo no va a tener a nadie que lo asista. En los geriátricos, los ancianos están cuidados por personas que en su mayoría no están debidamente capacitadas. Y esto se traduce en el deterioro de los viejos. Uno de los accidentes más comunes en los geriátricos es el paso de la alimentación (que va por sonda) a través del suero que va a la vena. Esto ocasiona la muerte.
¿Hay otros ámbitos donde debieran trabajar y no están?
Viviana Ramírez (VR): En las ambulancias. Hay choferes que hacen de enfermeros y sólo tienen un curso de primeros auxilios. PAMI es el único que cumple más o menos eso. Tienen ambulancias con un enfermero, el médico y el chofer. En la ambulancia el médico diagnostica lo que tiene el paciente y el enfermero le toma los signos, le pone la vía, lo contiene y le da la medicación en el momento. En el SAME, nosotros conocemos dos licenciados nada más. Cuando ocurrió lo de Cromañón y el choque del tren en Once, nosotros tendríamos que haber estado trabajando ahí. Nosotros hacemos cursos para determinar la posibilidad de salvarse que tiene cada paciente en caso de catástrofe. Un enfermero puede ahí mismo poner una vía o un suero para que el paciente no llegue al shock. También puede hacer una reanimación si está el oxígeno. En Cromañón, por ejemplo, no había oxígeno. Todo el personal que estuvo allí actuó de manera improvisada. Los bomberos no tienen idea de lo que tienen que hacer, salvo primeros auxilios.
¿En qué condiciones laborales se encuentran?
IS: La ley dice que la jornada máxima es de 35 horas semanales. En las áreas críticas o cerradas se trabaja solamente 6 horas diarias, de lunes a viernes. Hay otros compañeros que hacen 35 horas semanales, aquellos que trabajan noche por medio 10, o sea que en una semana hicieron 30 y en la otra 40. En promedio se trabajan 35 horas. Después está el problema de los “franqueros”, que trabajan 14 horas el sábado y 14 el domingo, o sea, 28. No trabajaron 35, pero atendieron 28 horas en un solo fin de semana. Además, con los feriados “puente” terminan destruidos. Por otra parte, desde los noventa se implementaron las horas extra bajo un engañoso título que es el de “módulo”. Si se necesita un lugar para efectuar una cobertura, ésta debe ser de turno completo, es decir, un bloque de horas extra. En la actualidad, hay muchos compañeros que tienen que hacer esos módulos, con lo cual hay compañeras que son un verdadero peligro andante.
Claudia Betes (CB): Si hacés doble turno, no estás con la suficiente lucidez como para poner vías. Y se pueden cometer errores. Ves un medicamento y pensás que es otro.
VR: Los auxiliares cobran $1.600 de básico, más los adicionales y los módulos serán de casi $4.000. En la municipalidad, está permitido hacer hasta 20 módulos y con eso podés cobrar $2.000 más. Pero tenés que quedarte 20 días. Incluso, la gente hace más horas extras. Como falta personal, a veces se quedan todos los días, incluyendo sábados y domingos. Los enfermeros están cobrando $1.800 de básico. Con los incrementos y las horas extra llegan a $4.000. Y yo, de licenciada con personal a cargo, estoy cobrando alrededor de $7.000, con $2.700 de básico.
¿Cuántos pacientes atienden por día?
IS: Depende de la sala. En internación, el promedio general puede ser de 8 a 10 pacientes por enfermero. A veces queda una enfermera con 20 personas porque una se enfermó y la otra no vino. Varía también según el grado de dependencia. Si vos tenés 8 chicos en pediatría, ellos están con sus 8 mamás. Si bien tenés que estar muy alerta no es lo mismo que estar en clínica médica donde hay gente más dependiente de vos para moverse, para orinar, con suero o medicación y que no tiene a nadie al lado que la ayude. En terapia tenés enfermeros con 2 pacientes con respirador, eso es una locura. En ese caso debiera ser un enfermero para cada persona.
¿Se despersonaliza mucho la atención?
VR: Sí, yo hice una investigación en el Hospital Paroissien y había un auxiliar de enfermero cada 45 pacientes de cirugía. Se calcula que tiene que haber como máximo 4 pacientes de cirugía por enfermero. Entonces, te tiene que ayudar la familia del internado. Te llaman cuando se les terminan los sueros.
Miguel Cobacho (MC): Hay un grupo de voluntarias, las damas de rosa, que ayudan en la alimentación de los pacientes en las áreas de clínica médica sobre todo. Vienen 3 ó 4 horas. Sin ellas, no daríamos abasto.
¿Realizan tareas propias de otras profesiones u oficios?
IS: Sí, hacemos tareas de los camilleros. Eso trae muchos problemas en la columna a lo largo de años, cuesta mucho pasar un cuerpo humano de más de 50 kilos de una cama a una camilla. Además, las camas ortopédicas no son muy buenas. Por ejemplo, en el Hospital Roca, que es de rehabilitación y tienen pacientes con paraplejia o hemiplejia completa, la mayoría de las camas están todas rotas, son viejas, no son funcionales y no tienen control automático. Otra tarea que hacíamos los enfermeros, y no debíamos, era cambiar los manómetros de los tubos de oxígeno, que son pesadísimos. También se colabora con el servicio de nutrición, con el servicio de vigilancia, con el administrativo. A veces pedimos auxiliares de servicio para hacer todas esas cosas: llevar o pedir insumos a esterilización, jeringas, algodón. En el Hospital Álvarez, el sector de enfermería hace tareas de esterilización, que no debería.
¿Son comunes los accidentes laborales en enfermería?
IS: Los más típicos son los pinchazos con algún objeto cortante (bisturí, aguja), que alguien dejó sin encapuchar o la dejó mal guardada. Después hay accidentes con líquidos. Por ahí se derrama sangre, orina, pus o alguna secreción, pacientes que escupen…
¿Los elementos de seguridad escasean?
IS: Esos elementos hay que administrarlos. Yo tengo guantes, pero sé que si los uso en todo momento (algo que debería ser así), no me van a alcanzar. Entonces, los optimizo. Por ahí hago 2 ó 3 cosas con guantes, después los tiro y me lavo las manos. Esto te pasa también con el jabón y el papel higiénico. Hay provisión, pero no en cantidad suficiente.
¿En qué categoría se encuadran los enfermeros?
IS: Laboralmente, no somos reconocidos y estamos dentro de un escalafón general, de oficios y actividades. De hecho, nos encuadran en lo que se llama “carrera administrativa”. Los auxiliares están con los demás oficios, se toma al auxiliar de enfermería como un oficio y no una profesión. Para ser camillero, no hay un curso. Es un oficio que se aprende mientras se realiza. Pero no ocurre lo mismo con los auxiliares de enfermería. Así sean del nivel más bajo de formación, tienen un curso anual de 9 ó 10 meses, donde reciben mucho conocimiento de técnicas, biológicos y anatómicos para poder comprender y ser un auxiliar de la profesión. Los enfermeros que tienen título profesional, pero no pasaron por la universidad. Son terciarios y figuran como técnicos. Están agrupados junto a técnicos de esterilización que, si bien trabajan en la profesión de la salud, no tienen una responsabilidad directa sobre el paciente y no tienen que cuidar ningún proceso. La máquina es la que hace el laburo. El radiólogo sí tiene trato directo con el paciente, pero sólo al momento de hacer la placa. En cambio, el enfermero está con el paciente antes, durante y después de ser atendido. Lo ve cuando vuelve, todo el tiempo. A pesar de esto, a los enfermeros los encuadran con los técnicos, aunque tengan título profesional. Por último, los licenciados en enfermería estamos reconocidos como profesionales, pero de escalafón general, o sea, estamos con el abogado, con el arquitecto, con el ingeniero, en vez de estar con los psicólogos, con los bioquímicos, que es otro escalafón, que es la carrera profesional en salud.
¿Y la figura del “becario”? ¿Quiénes son?
VR: Dicen que ahora van a poner becarios para hacer la especialidad en enfermería y los van a tener trabajando. Viene a ser mano de obra barata, porque no los reconocen como trabajador. Esto ya se usó en provincia: te pagaban un sueldo, pero no tenías derecho a nada, no tenías obra social.
NOTAS:
[1] Realizadas los días 29 de septiembre y 10, 18 y 25 de octubre de 2012.