¡BASTA DE TRATA!
Para que este comercio de explotación sexual se desarrolle no alcanza con que exista solamente un patrón, hay todo un sistema que se construye alrededor del negocio. Hay que sacarse de la cabeza esta idea de que la trata de personas tiene que ver siempre con el secuestro y la extorsión; en realidad hay una coerción económica que es previa a la situación de prostitución, como suele suceder con la mayoría de la clase obrera. Esa coerción económica es la necesidad que arrastra a muchísimas mujeres pobres, particularmente, a caer en estas redes de trata.
Rosana López Rodríguez – Trece Rosas
Según las cifras oficiales del Ministerio de Justicia, durante 2017, las fuerzas federales de seguridad rescataron al menos 423 mujeres que permanecían secuestradas en diferentes prostíbulos. A su vez, las mismas estadísticas revelan cifras alarmantes de denuncias recibidas –durante los últimos seis años- sobre grupos criminales dedicados a la trata de personas en Argentina. Con este marco, diferentes organizaciones internacionales y locales realizarán el primer Congreso Internacional Abolicionista, que se llevará a cabo en el Centro Cultural San Martín –con fuerte respaldo de la Universidad de Buenos Aires (UBA)- durante los días 17, 18 y 19 de mayo.
Las agrupaciones que organizan este congreso harán especial énfasis en una problemática reciente y puntual: mientras las denuncias por trata de personas se mantienen en niveles altos y mientras decenas de mujeres son rescatadas de los prostíbulos, al interior del movimiento feminista se ha detectado la aparición de una polémica tendencia que intenta regular mediante la sanción de una nueva ley -y el ataque contra otra ley ya vigente- el ejercicio de la prostitución como una alternativa económica viable para personas en situación de vulnerabilidad social.
Para repudiar la aparición de esta tendencia ideológica –y de grupos financiados internacionalmente que respaldan el proxenetismo y la explotación sexual en el país- llegarán a la Argentina diferentes e importantes organizaciones de España, Brasil, Puerto Rico y México.
En el encuentro, a través de clases y paneles, denunciarán junto a institutos de la Universidad de Buenos Aires y una decena de grupos independientes locales el avance de las mafias vinculadas a la trata de personas.
En un documento publicado recientemente, la organización Trece Rosas dijo: “En el último tiempo vivimos una verdadera avanzada de sectores que reclaman la legalización y reglamentación de la prostitución. Quien aparece dirigiendo este movimiento es la Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina (CTA), una organización que parece progresista porque se define como sindicato y reclama por demandas ‘obreras’. Pero en realidad detrás de las palabras lo que se oculta es una defensa de los proxenetas”.
Por otro lado, en un reportaje exclusivo con MiBarrio.blog, una activista del feminismo abolicionista e integrante de Trece Rosas, Rosana López Rodríguez, dijo: “Decidimos impulsar la convocatoria a este congreso por una avanzada que no solamente ha captado los medios de comunicación, las voluntades políticas y la academia, sino que está ingresando a captar -por la vía ideológica del reglamentarismo- a las adolescentes…porque está entrando en centros de estudiantes y en escuelas medias; esa inserción es bastante preocupante”.
LAS LEYES
Dirigentes de AMMAR han quedado involucradas recientemente en al menos tres causas judiciales por explotación de personas. En distintos procedimientos, el Ministerio Público Fiscal hizo caer sobre estas líderes de la CTA toda la fuerza de la ley 26.364, que fue sancionada en 2012, y castiga con penas de prisión a las personas implicadas en las diferentes instancias de los casos de trata.
Entonces, para enfrentar el positivo alcance de la ley 26.364 -que impide cualquier tipo de asociación que sirva para germinar grupos de prostitución- este grupo de la CTA intentará próximamente sancionar la ley de “Reconocimiento de los Derechos de las y los trabajadoras/es sexuales en Argentina”.
Al respecto, cabe destacar que una reciente investigación realizada por Rosana López Rodríguez muestra cómo AMMAR –grupo perteneciente a la CTA- recibe dinero de grupos financieros internacionales abocados a la reglamentación de la explotación sexual y la apertura de prostíbulos alrededor del mundo.
En esta investigación, la activista explicó: “La tarea del regulacionismo es la de utilizar a una fracción de la clase obrera, las prostitutas, para blanquear a la fracción burguesa que maneja el ‘rubro’. Logrado este objetivo, AMMAR dejará de ser una ONG y pasará a ser un sindicato y sus representantes se consolidarán como la burocracia sindical que aspiran a ser. En ese momento, el objetivo de AMMAR estará cumplido. La Argentina se habrá transformado, como Alemania, en el ‘infierno en la tierra’ para miles y miles de mujeres”.
TRATA DE PERSONAS EN ARGENTINA
Al caracterizar los alcances de las mafias de trata de personas que operan en Argentina, la activista López Rodríguez dijo a MiBarrio.blog: “Para que este comercio de explotación sexual se desarrolle no alcanza con que exista solamente un patrón, hay todo un sistema que se construye alrededor del negocio. La ley de trata amplía ese campo penalizado por el cual se sanciona la explotación. Hay que sacarse de la cabeza esta idea de que la trata de personas tiene que ver siempre con el secuestro y la extorsión; en realidad hay una coerción económica que es previa a la situación de prostitución, como suele suceder con la mayoría de la clase obrera. Esa coerción económica es la necesidad que arrastra a muchísimas mujeres pobres, particularmente, a caer en estas redes de trata”.
Además, dijo: “¿Qué está haciendo el Estado? ¿Cuáles son las políticas que el Estado está poniendo en práctica para penalizar realmente este delito? La trata y el proxenetismo son delitos. Pero las mujeres en situación de prostitución no son delincuentes ni deberían ser perseguidas. Es por ese motivo que las abolicionistas luchamos hace muchísimos años por la derogación de los artículos del Código Contravencional por los cuales la policía tiene autoridad para detener a las mujeres que están en las calles ejerciendo la prostitución de forma autónoma”.
Por último, la activista se preguntó: “¿Cómo puede ser que los delitos de trata aumentan pero se realizan pocos allanamientos? Con este delito sucede lo mismo que con el narcotráfico. Estamos en un sistema capitalista, bajo un régimen de clase y -consecuentemente- el personal político de la burguesía…de este gobierno o del anterior…no pueden o no quieren atacar en la realidad ninguno de estos negocios. Aunque, en lo formal, las leyes existen. Tenemos leyes que pueden ser buenas y, sin embargo, en la realidad, no se hace nada. Esas leyes no se ponen en práctica. Las leyes -bajo el régimen burgués- terminan siendo letra muerta. Es por eso que la consigna de este Congreso es ‘hacia un abolicionismo real’; este Congreso lo hacemos no solamente por una avanzada del enemigo, sino porque el capitalismo y la burguesía terminan siendo -siempre- colaboradores de estos negocios”.