Moral y dirección. El movimiento piquetero ante la pequeña burguesía en el camino hacia el Argentinazo.
Por Sebastián Cominiello
Grupo de Investigación de la Pequeña Burguesía – CEICS
Las jornadas del 19 y 20 de diciembre de 2001 significaron la culminación de un proceso de pauperización y proletarización, tanto para la pequeña burguesía como para el proletariado de, por lo menos, 20 años. En este artículo describiremos el “Piquetazo”, lo que para nosotros significa el comienzo, en el corto plazo, del Argentinazo. Durante el 2001 se produjeron varios hechos que, frente a lo sucedido en diciembre, quedaron opacados, pero que no deben perderse de vista a la hora de considerar el proceso general. El Argentinazo es a su vez, la síntesis y el resultado de todos estos acontecimientos. El caso del Piquetazo resulta más que interesante en tanto parece ser la demostración de la fuerza del sector más dinámico de la clase obrera: el movimiento piquetero. Denominamos “Piquetazo” a las tres semanas consecutivas de cortes de rutas y manifestaciones que se produjeron a fines de julio y comienzos de agosto de ese año. En la primera semana se produjo un corte de 24 horas, de 48 en la segunda y de 72 horas en la tercera. Un breve y parcial racconto de los hechos, nos permite observar cómo el movimiento piquetero comienza a perfilarse como dirección moral de la explosión vivida en diciembre de ese año.
Los hechos1
Durante el 31 de julio de 2001 comenzó la primera jornada de cortes de ruta y manifestaciones en todo el país con una duración de 24 horas. Se cortaron las rutas nacionales 3, 11, 22, 34, 38, 45 y 66, en diferentes tramos de las mismas y en 14 provincias. Dentro de las manifestaciones más destacadas de la semana se encuentra la sucedida en Neuquén, donde 3.000 personas, entre desocupados, empleados estatales y militantes de partidos de izquierda, cortaron la ruta 22. En Tucumán se sucedieron alrededor de una decena de cortes de rutas. En La Rioja, los docentes, los trabajadores estatales y los trabajadores de justicia realizaron un paro y cortaron la ruta 38. En Santa Fe cientos de manifestantes realizaron un corte sobre la ruta nacional 11. En tanto, en Bahía Blanca como en Entre Ríos, se produjeron cortes con hechos de violencia. En el primer caso hubo incidentes con manifestantes de la UOCRA y en el segundo con militantes del Polo Obrero.
Sin embargo se puede considerar que la primera jornada se realizó pacíficamente. El martes 7 de agosto tuvo lugar la segunda jornada de cortes, esta vez de 48 horas. Para esta semana el gobierno envió a 500 inspectores a que investigaran a las organizaciones políticas, debido a las denuncias que se realizaron en contra de los dirigentes piqueteros por realizar coacción con los Planes Trabajar. ATE convocó a un paro también de 48 horas. La Capital Federal tuvo un lugar más preponderante, en el mapa de cortes y piquetes, que la semana anterior: se cortaron la Av. Corrientes al 5600, Perón al 500, Rivadavia y Callao y hubo una marcha hacia Plaza de Mayo. Las manifestaciones más importantes se encontraron en La Plata con más de un millar de manifestantes que pedían por el desprocesamiento de 58 piqueteros presos por el gobierno de De la Rúa. Además se sumaron 60 organizaciones barriales y de desocupados; Centros de estudiantes de La Plata, Berisso y Ensenada, concentrándose en la Plaza San Martín. También estudiantes de la Facultad de Medicina, Ciencias Naturales, Ciencias Exactas, Informática y del Colegio Nacional tomaron sus instalaciones en repudio a los recortes de presupuesto educativo y anunciaron su adhesión a los piquetes. En tanto, los trabajadores de Obras Públicas manifestaron en la calle 7 y 58. En Ushuaia, piqueteros incendiaron un colectivo con el que habían cortado la Avenida Perito Moreno (un tramo de la ruta 3 que cruza el parque industrial). Éstos pertenecían a la CCC, Comisión de Lucha Renacer y ATE. En la provincia de Buenos Aires hubo cortes en Mercedes, Nueve de Julio, Moreno, Marcos Paz, San Antonio de Areco, Bahía Blanca, Mar del Plata, Tigre, Merlo, Morón, José C. Paz, La Matanza, San Miguel, Tres de Febrero, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Avellaneda, Esteban Echeverría, Ezeiza y Florencio Varela. Las jornadas concluyeron el 8 de agosto con la marcha que realizó la CTA desde Con- greso hasta Plaza de Mayo. El martes 14 comenzó la tercera jornada con un corte de 72 horas. Ese día se produjeron 29 cortes de ruta en todo el país, según datos oficiales. Para el miércoles 15 los cortes ascendieron a 33, 103 fueron las interrupciones de caminos y calles y 14.000 los participantes de las manifestaciones. En la provincia de Buenos Aires se sucedieron 14 cortes y 7 en el Chaco. Las 72 horas culminaron el jueves 16 con 35 cortes y con una manifestación de 7.000 personas frente a la Gobernación de la provincia de Buenos Aires.
Llegando a diciembre Parece llamativa la cantidad de cortes de rutas y calles que se dieron en estas tres semanas, pero hacia fines del mes de agosto y durante septiembre las manifestaciones no descienden en su número. Este crecimiento va a continuar hasta fines de año. Es notorio cómo comienza a arrastrar a sectores no obreros, como los estudiantes y docentes universitarios y, posteriormente, a comerciantes y otras capas pequeñoburguesas. En este cambio vemos también cómo el movimiento piquetero se transforma en referencia de la pequeña burguesía que salió el 19 de diciembre a la calle: lo que denominamos dirección moral. Una dirección que consistió en mostrar el camino a seguir para obtener resultados que otros instrumentos, como la CGT o las diversas cámaras empresariales, no pudieron (o no quisieron) obtener en los últimos 20 años. En futuros avances de nuestra investigación sobre este fenómeno de la dirección moral del movimiento piquetero, daremos cuenta de nuevos hechos en el mismo sentido.
Notas
1Toda la información corresponde a los diarios burgueses de circulación nacional y a periódicos obreros como Hoy y Prensa Obrera.