Romina De Luca
Gabinete de Educación Socialista – CEICS
Contanos un poco las características de la huelga docente en Barquisimeto. ¿Cuáles son las demandas de los docentes, hace cuánto tiempo que están en lucha, qué acciones desplegaron, la respuesta del resto de la comunidad? ¿Lograron articular con otros sectores de trabajadores? ¿cuál ha sido la respuesta estatal hasta el momento?
El problema docente se origina en el 2013. El ajuste económico reaccionario que impulsa Maduro y la reducción de las importaciones al 60% en medicina y alimentos hace que la crisis pegue sobre los trabajadores. En esa oportunidad, las reservas estaban en 30.000 millones de dólares, hoy están en 8.000 millones producto de la fuga de capitales. Maduro, en agosto de 2018, aplicó un paquete neoliberal que se llama programa de reconversión monetaria y en esa parafernalia elimina también los contratos colectivos.
La eliminación de los contratos colectivos pasa por una resolución del ministro de trabajo Eduardo Piñate que propone revisar los contratos colectivos y la aplicación de un Factor 900 que no es más que la disminución de las primas salariales violando la constitución y el artículo 88 de la República Bolivariana de Venezuela que dice que no se puede violar la progresividad de los derechos sociales.
La huelga tiene el apoyo de la comunidad porque los padres también sufrieron el embate del ajuste económico-social. Un docente en Venezuela gana 5,5 dólares mensuales y eso no le alcanza para subsistir: o se dedica a otra cosa o está peleando en las calles para poder subsistir. La canasta básica en Venezuela está en 900 dólares y el sueldo de un proletario venezolano es de 5,5 dólares.
Intentamos unificar con otros sectores de trabajadores, pero la represión del gobierno de Maduro es grande. Por ejemplo, en el noreste del país, en ciudad Guayana tiene 14 obreros presos; el caso de Rodney Alvarez que tiene siete años preso con montaje judicial, hace cuatro años desaparecieron compañeros de Mérida, entre ellos, Alcedo Mora que se cumplen el próximo 27 de febrero, cuatro años de su desaparición forzada por el Servicio Bolivariano de Inteligencia.
¿Qué es el comité por la defensa del contrato colectivo del magisterio venezolano? ¿Quiénes lo conforman y qué objetivos tiene?
El comité por la defensa del contrato colectivo lo elegimos nosotros los profesores en asamblea, agremiados a cualquier sindicato para la defensa del contracto colectivo que se firmó en abril de 2018 y que rige hasta abril de 2020. Ese contrato colectivo tiene una mejora y una serie de conquistas logradas por los trabajadores que están siendo suprimidas por el gobierno de Maduro. Es decir, los comités los conforman docentes afectados por las medidas anti-obreras de Nicolás Maduro. Los objetivos del comité son la defensa de los artículos 89º y 91º de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela que protege el trabajo como un hecho social y el salario discutido desde la canasta básica.
Entiendo que para el desarrollo de la huelga y el paro ustedes usaron la figura de “asamblea permanente”. ¿Por qué no nos contás que implica y cómo se organizan con los compañeros? Los medios hablan de “paro técnico”…
Las Asambleas Permanentes están basadas en la cláusula 82º del Contrato Colectivo Único la cual permite que el o los sindicatos firmantes llamen a los agremiados o no afiliados para discutir y conocer la forma del contrato colectivo. Nosotros nos acogemos a esa cláusula para discutir la eliminación del contrato colectivo mismo, la eliminación de la escala salarial y del factor 900.
Los medios hablan de paro técnico porque hay profesores que van sin comer a las instituciones o no van porque no tiene comida en su casa, no tiene pasaje, no tienen dinero, no tienen como subsistir ante un día de jornada laboral y eso es producto de la política del gobierno que generó hambruna en Venezuela, no solo en los docentes sino también en el resto de la población. En definitiva, es paro técnico porque quién va a ir a trabajar con el estómago vacío ante el embate del ajuste económico y el paquete neoliberal que lanzó Maduro.
Venezuela es el único país donde se venden billetes en el mercado negro. Por ejemplo, si tú quieres 200 bolívares debes pagar 250, es un porcentaje para poder tener efectivo. En los bancos no hay, el efectivo lo controla el Ejército, la banca y el lumpenproletariado. La comida la controla el mercado negro, la guaira, los malandras, el lumpenproletariado en detrimento de la población. La función es meter terror al conjunto de la población.
Entonces cuando los medios hablan de “paro técnico” lo que quieren decir es que no hay condiciones para que vayan a trabajar los docentes aunque quisieran.
Sí. Exactamente.
¿Cuál es el alcance de la huelga? ¿Qué departamentos se encuentran parados y cuál es el impacto a nivel nacional de este conflicto?
La asamblea permanente se intensificó en el Estado de Táchira. Hoy producto de la calamidad que vive el pueblo venezolano fueron a buscar la “ayuda humanitaria” que está en Cúcuta. Rompieron el cerco policial-militar que está en la frontera para buscar la ayuda humanitaria. ¿Por qué? Bueno porque aquí los venezolanos estamos pasando hambre. Allá los docentes argentinos pueden subsistir, a pesar de sus bajos salarios. Acá los docentes venezolanos estamos con todos los zapatos rotos, no tenemos medicina, estamos pasando calamidades. Estamos pauperizados, hay que decir la verdad.
Además de Táchira, los Estados que están alzados son Barinas, Trujillo, Lara donde estoy yo, Maracaibo, Maracai, se está incorporando Caracas, el Estado de Sucre, a pesar de que el sindicato allá es afín a Nicolás Maduro se pusieron a la cabeza en defensa de los trabajadores. En esos Estados se hicieron grandes movilizaciones y en todo el resto del país también hay movilizaciones producto del ajuste económico.
Hay una parte del sindicalismo docente que está rechazando la huelga, ¿no? ¿Cuál ha sido la respuesta estatal: hay represión estatal o utilizan formas paraestatales? En Caracas también hay protestas. ¿Cómo es protestar en la capital con los fuertes enfrentamientos que hay hoy día?
Sí, efectivamente hay una parte del sindicalismo de Lara que está con la gobernadora, Carmen Meléndez, para demandarnos a los profesores de brazos caídos en sus funciones. En cambio el Colegio de Profesores donde se agrupan los comités de base está llamando a las movilizaciones en las calles. Hay un sindicato patronal en el cual yo soy directivo y ese sindicato llamó a la huelga y nos llamaron golpistas. Acá el único golpista es Nicolás Maduro porque golpeó la Constitución en tal caso.
A lo largo de los 36 días de lucha, el gobierno utiliza lo que llaman las UBECH (Unidad de Batalla Electoral Hugo Chávez) que son organizaciones comunitarias brazo político del Partido Socialista Unido de Venezuela, de Maduro, para arremeter en las escuelas, amenazarnos a los profesores en conjunto con los directores. También hay grupos paramilitares y de delincuentes amedrentando.
En Caracas hubo conatos de protesta, pero hay una particularidad: existen grupos paramilitares del gobierno como La Piedrita, y otras organizaciones parapoliciales del gobierno para arremeter contra la protesta social. Obviamente esos grupos paramilitares responden a los intereses de Nicolas Maduro.
A propósito de la huelga del 7 y del 14 de este mes, ¿Cuáles son las modalidades de lucha que están usando? Vimos que articulan docentes municipales, estatales y nacionales.¿Hay distintas condiciones de trabajo entre todos ellos? El día 7 de febrero tomaron la intercepción del Pie de Llano en un piquete o corte de calles, ¿son piqueteros?
Existen diferencias entre los docentes nacionales y estatales pero lo que hizo Nicolás Maduro, con su paquete económico, es igualarnos a todos negando las conquistas sociales que fuimos ganando como primas y otras conquistas logradas por los sectores combativos. Todo eso Maduro eliminó de un hachazo.
Tenemos 37 días en asamblea permanente con movilizaciones y piquetes en la calle por defensa del contrato colectivo y el artículo 91º de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Los cortes de calle (y nuestras demandas) son nuestra bandera de lucha.
Hoy enfrentan una avanzada judicial que busca criminalizar la protesta y desmantelar la huelga.
El gobierno de Maduro utilizó los sindicatos patronales como Sinafum Larapara criminalizar la protesta. El Tribunal Noveno de Primera Instancia dictó medida cautelar exhortado a los maestros a reincorporarse a las aulas a la brevedad. Dicen respaldar los derechos de los niños y para eso criminaliza a los profesores. Utiliza también a Consejos Comunales y a UBECH en conjunto con el patrón que encabeza Yelitza Morales para criminalizar la protesta social. Los docentes en Lara se declararon en rebeldía, ‘bueno que nos metan presos’ dijeron, porque la quincena (del salario) alcanza para dos días nada más. Hay varios municipios alzados y tomaremos las calles, no importa que nos judicialicen o nos metan presos.
Te hago una pregunta de reflexión política más general como para pensar también el papel de Hugo Chávez en todo este proceso que hoy explota con los docentes completamente pauperizados, por eso la Huelga de los zapatos rotos, como decías, ni para zapatos hay. Leí que en una entrevista vos hablabas de “política neoliberal” en relación al recorte salarial que sufren los docentes a partir del paquetazo lanzado en agosto del año pasado. No creés vos que más que neoliberal puede hablarse de una política burguesa. Neoliberal remite a un tipo de llamémosle “administración u orientación” del personal político: hay neoliberales y desarrollistas, industrialistas, etc. Pero eso hace perder de vista las continuidades en el proceso. Por eso la pregunta sería, desde cuando los docentes vienen perdiendo poder adquisitivo y distintos recortes a nivel salarial. La inflación es una forma de reducción salarial y de ajuste, por ejemplo. Pienso entonces en el rol de Hugo Chávez ¿qué reflexión te merece?
Maduro y Chávez tienen la misma política. Chávez se montó sobre los petrodólares, no se sintió la crisis porque, por ejemplo, gobernó con un barril en 160 dólares. Al igual que Maduro aplicó políticas anti-obreras, por ejemplo, desconocer los derechos laborales de las empresas básicas que eliminó el comisariato en PDVSA. Es más, contradijo la misma Constitución al poner “protectores”. Una de las políticas de ajuste fue la doble tributación con Estados Unidos exonerando de impuestos a las exportaciones e importaciones. Hablan del patrioterismo y son más anti-patrioteros. Chávez hizo las empresas mixtas de petróleo, el 49% se la quedaban las transnacionales sin poner un medio (ustedes dicen un peso) y el 51% lo controlaba el Estado, pero el Estado ponía todo: refinación, exploración, comercialización, todo. Obviamente, todo en desventaja del pueblo venezolano que es quien paga la crisis. Con Chávez comienza el mayor defalco de la historia venezolana. Con la fuga de capitales eso desmejora no solo a los docentes sino también a todos los trabajadores venezolanos. Fuga de capitales a Andorra, Nueva York de la boliburguesía.
En definitiva, el ajuste económico empieza en 2007 cuando Chávez está vivo, con la reducción de las importaciones, poco a poco, pero se agiganta esa reducción en 2013. Es el quiebre total cuando baja el precio del petróleo, a pesar de que estaba en 150 dólares baja a 100 y luego a 80, si uno viera un gráfico ve la fuga y cómo empieza a acelerarse la crisis que recae sobre todos los trabajadores.
¿Y esa política anti-obrera afectó a los docentes? Acá es similar, el precio de la soja determina si hay más o menos recursos, pero nunca son para los trabajadores sino más bien para subsidiar a la misma burguesía. De hecho, en Argentina, la recomposición del salario docente bajo el kirchnerismo sigue un poco el precio de la soja, cuando se estancó la inflación hizo lo suyo: un ajuste invisible.
Aquí el proceso es igual pero con PDVSA.
¿Qué es lo que vos crees que está en juego en esta huelga para ustedes y para el resto de los trabajadores? Y te sumo otra pregunta, ¿no crees que los docentes deben encarar otras batallas? La lucha ideológica, la disputa del sentido de la educación burguesa que el chavismo busca impartir en la conciencia de la clase obrera ¿no crees que esa disputa debería ser impulsada por el conjunto de la docencia?
Está en juego la calidad de vida y la vida misma de los trabajadores venezolanos. Los docentes que estamos pelando en las calles estamos peleando contra un gobierno cívico-militar, lo que Gramsci llamaría corporativismo militar. Muchos docentes renunciaron para irse a otros países porque acá en Venezuela no se garantiza el derecho a la vida. El chavismo/madurismo o como dicen los anarquistas el chavomadurismo no responde a los intereses de la clase obrera. Entonces menos su educación está para la liberación del pensamiento crítico. El chavomadurismo desmanteló la educación pública y privada. Si yo hoy trabajara en Argentina ganaría más de lo que gano aquí en Venezuela.
Y eso que Argentina tiene uno de los salarios más bajos del mundo…
Imagínate. Hoy nuestra lucha es por el artículo 91º. Hoy ambas fracciones (Maduro y Guaidó) responden a bloques imperiales. Maduro al ruso-chino y Guaidó al norteamericano. Ninguno responde a los intereses de la clase obrera.
¿Cómo crees vos que pueden los docentes en lucha ayudar a construir una salida independiente para la clase obrera que supera las salidas burguesas que hoy le proponen Maduro y Guaidó? Para nosotros, esto remite a construir una salida socialista y por eso antes te preguntaba por la lucha ideológica cultural, superar esa idea de que esta sociedad capitalista en decadencia es lo único posible y que el chavomadurismo allá el kirchnerismo acá es “socialismo siglo XXI”.
La política de Maduro fue prácticamente destruir el pensamiento socialista en Venezuela. No se habla de socialismo. Te hablan del hambre que está pasando el pueblo venezolano, te señalan los zapatos rotos que cargamos los trabajadores venezolanos y lo paupérrimo que estamos. Entonces, lo primero que hay que demostrar es que Maduro no es socialista, no responde siquiera al marxismo. Maduro es un liberal, ultracatólico, ultracapitalista y esa es la idea que tenemos que generar. Como acá hablar de socialismo es hablar de Maduro esto significa que Maduro acabó con el pensamiento socialista. Solo creó un corporativismo militar como la Alemania nazi. 5.5 dólares por mes para alimentarte: eso no alcanza para comer, eso no es socialismo. Maduro acabó con todo. Y en educación se tradujo en renuncias masivas. El ajuste de Maduro es peor que el de Macri. No es que Macri sea santo de mi devoción pero allá hay comida, vestimenta, medicina. Por eso, con nuestra huelga está en juego prácticamente la vida de la clase obrera. En el mes de diciembre cuando explotó lo de las tablas salariales encarcelaron a 14 dirigentes en Guayana: Rubén González que la encabezó y otros dirigentes. Los iban a llevar a la peligrosa cárcel de El dorado y la presión popular y de los medios y redes de comunicación evitó que los llevaran a El Dorado y los encarcelaron en La Pica. Luego de esa lucha, tomamos la bandera los docentes y las enfermeras. A las enfermeras las aplacaron y las criminalizaron y acá estamos los docentes en las calles aún peleando.
Chavismo y madurismo dejaron intactas las estructuras sociales en nombre del socialismo. El mismo Che Guevara lo decía, con las mismas armas del capitalismo no se construye una revolución. Chávez, en su primer gobierno, hizo unas reformas constitucionales, pero bajo las características de un populismo y reformismo muy avanzado desde el punto de vista liberal. Chávez fomentó el control cambiario que generó las fugas de capitales que benefició a la bolibuguesía, desplazó a la burguesía netamente importadora. Destruyeron las pocas fuerzas productivas que había en Venezuela. Entre Chávez y Maduro destruyeron el 90% de las fuerzas productivas. Guaidó representa a la burguesía tradicional y por eso tampoco puede responder a los intereses de los trabajadores. Maduro y Cabello representan a la boliburguesía corrupta. Por eso tenemos que buscar una salida independiente de los trabajadores autónoma de esas figuras. Una asamblea permanente de los trabajadores es el germen. Hay que buscar que la salida sea de los trabajadores porque ellos (Maduro y Guaidó) están buscando una salida concertada y negociada si la consiguen va a quedar en pie las estructuras del chavismo que trajeron odio, la ley del hambre, control cambiario, ajuste. Por eso los trabajadores tenemos que salir a la calle para manifestar el descontento popular contra esa política.
Finalmente, Darío, mencionabas antes a Alcedo Mora y Rodney Álvarez. ¿Por qué no nos contás un poco de ellos?
Alcedo Mora fue un dirigente de izquierda en el Estado de Mérida, del partido de la revolución de Venezuela ruptura tercer camino. Es un activista social que organizaba a los trabajadores invisibilizados en Mérida y en Trujillo a nivel nacional. Ese compañero el 27 de febrero de 2015 fue desaparecido por el servicio bolivariano de inteligencia por denunciar el contrabando de gasolina a Colombia por parte de PDVS en conjunto con los altos mandos militares de la zona andina con paramilitares colombianos. El caso de Mora lo lleva la ONG Provea a la comisión de tortura y desaparición forzada a la ONU porque aquí no hay estado de derecho. Los invito a hacer el hashtag #dondeestáAlcedomora el 27 de febrero para acompañar la campaña nacional e internacional. Rodney Álvarez es un dirigente obrero del ferrominero Orinoco que hace siete años le hicieron un montaje judicial las mafias del PSUV en el Estado de Bolívar dirigido en ese momento por el General Francisco Rafael Gómez, el Movimiento 21 y la Federación de los Trabajadores que dirigía Nicolás Maduro en ese momento. Hicieron un montaje judicial para incriminarlo de un asesinato que no cometió. Rodney Álvarez está preso y es un preso político pero nadie, ni la oposición patronal, ni la supuesta izquierda en Venezuela toman el caso en cuenta.
Entonces, aquí en Argentina Razón y Revolución pide por la aparición inmediata con vida de Alcedo Mora y la liberación inmediata de Rodney Álvarez. Hacemos responsables por su vida y su seguridad al Estado, a Maduro y a Guaidó.